Estas tareas se realizarán en un plazo de entre uno y dos meses y requieren "un trabajo específico que no es fácil", dijo el ingeniero a cargo de los estudios.
La Intendencia de Maldonado continúa con su aspiración de que el puente número 2 de La Barra esté habilitado para la circulación de vehículos durante el verano y para esto dejó de lado el plan inicial y pasará a ejecutar otra estrategia: apuntalarlo en un plazo máximo de dos meses, abrirlo para la temporada estival y luego cerrarlo nuevamente para las reparaciones estructurales.
Así lo informó el ingeniero Eduardo Carrera, responsable de los informes técnicos, en rueda de prensa este martes por la mañana: "Se detectó que hay un riesgo para trabajar encima o debajo de él, por lo que se desechó el plan inicial de hacer trabajos sobre el puente y pasamos al plan B, de apuntalarlo, permitir la circulación de vehículos livianos y después hacer el trabajo definitivo".
Este "apuntalamiento" se realizará en un plazo de entre uno y dos meses y requiere "un trabajo específico que no es fácil". "Hay que hacer unos diques a los dos costados del puente en ambas cabeceras, cuatro ataguías para construir pilotes que van a servir de base para dos vigas metálicas que se van a poner transversales", narró Carrera.
El ingeniero hizo énfasis en que "esto no es una reparación, es un apuntalamiento".
"La reparación será después del verano. Será otra investigación: entrar al puente, ver dónde se puede retensar, cómo están las vainas existentes, hay que hacer una cantidad de estudios", prosiguió.
Carrera insistió en que las tareas a realizar en estos meses permitirán una "circulación segura" durante el verano para los autos.
Interrogado si las roturas del puente se debían a errores en la construcción (la estructura tiene 27 años), Carrera respondió: "No lo sabemos todavía. Requiere muchos estudios que todavía no podemos hacer".