"Lo que sucedió de 2019 a la fecha es que en ausencia o por falta de controles por parte del BSE, de la Inspección de Trabajo, producto de una política del gobierno anterior de achique, lo que provocó es el aumento de la accidentabilidad”, dijo el presidente del Sunca.
El Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos (Sunca) para este lunes a nivel nacional de forma parcial por la muerte de dos trabajadores en episodios sucedidos en los últimos días. Richard Ferreira, presidente del sindicato, criticó al gobierno anterior por lo que entiende fue una “política de achique” presupuestal que derivó en menos inspecciones, lo que, a su entender, trajo un “aumento de la accidentabilidad”.
En una futura reunión con el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Juan Castillo, el Sunca planteará impulsar una “campaña de sensibilización pública sobre la situación de creciente accidentabilidad en la industria de la construcción”. Además, pretenden que el gobierno dé respuestas “urgentes” a lo que entienden es una “emergencia”: “Hay que iniciar un proceso en el que ir a trabajar no signifique perder la vida”.
“Cada 20-23 días de trabajo efectivo muere un trabajador. Eso requiere de medidas concretas. Dentro de eso, la campaña de sensibilización. Debe haber acciones que lleven a aumentar el cuerpo inspectivo, en función de la insuficiencia de cantidad de inspectores para poder controlar y exigir el cumplimiento de la normativa laboral a nivel nacional. Tiene que haber presupuesto. No se puede esperar al año que viene, cuando se resuelva al Presupuesto Nacional, para poder resolver la cantidad de inspectores. Tiene que ser una decisión inmediata, estamos en una situación de emergencia en la industria de la construcción. Se necesitan los recursos suficientes para la contratación de inspectores”, dijo Ferreira este lunes en rueda de prensa.
Así las cosas, reclamó que haya “más fiscalizaciones” de las condiciones de trabajo en las obras. “Tiene que haber fiscalizaciones en el territorio. Ha aumentado la precarización y la cantidad de trabajadores por fuera de la seguridad social. La informalidad o la precarización es hija también de los accidentes laborales. Deberíamos de ir a una instancia de conformación de ámbitos con la participación de los organismos del Estado, del sector empresarial y trabajadores para ir a cada departamento sobre la base de corregir todas las situaciones que pongan en riesgo al conjunto de los trabajadores”, afirmó Ferreira.
Asimismo, reclaman “una definición urgente en lo que tiene que ver con la aprobación de una ley de salud y seguridad en el trabajo, en la que se ubique el tema de la accidentabilidad y malas condiciones como una de las prioridades a nivel nacional”.
En tanto, Ferreira también criticó lo que entendió como una reducción presupuestal para el despliegue de cuerpos inspectivos llevada adelante, a su forma de ver, en el gobierno de Luis Lacalle Pou.
“Entre 2014 y 2019 hubo una baja en los niveles de accidentes. Lo que sucedió de 2019 a la fecha es que en ausencia o por falta de controles por parte del BSE, de la Inspección de Trabajo, producto de una política del gobierno anterior de achique, lo que provocó es el aumento de la accidentabilidad”, apuntó.