Hasta ahora es el único imputado por el cargamento de 4,5 toneladas de cocaína que salió del puerto de Montevideo rumbo a Europa.
Se trata de un joven empresario que fundo su primera empresa en 2011 GCM Global, una compañía de comercio internacional dedicada a brindar logística a importaciones y exportaciones.
En 2013 además tras la legalización de la marihuana en Uruguay, pasó a asesorar a una empresa que produce yerba con cannabis (Cosentina) y se presentaba como “asesor de cannabis industrial”. Realizó gestiones en nombre de esa empresa para facilitar la habilitación por parte del Ministerio de Salud Pública.
En 2015 fue procesado sin prisión por falsificación de documento y estafa en relación a las actividades de su empresa.
En 2017 creo con testaferros la empresa Cabzen SA, con la cual concretó la exportación de soja a Bélgica en junio pasado en la que se detectó la droga.
En sus cuentas de redes sociales se mostraba cercano al MPP. Es por esto que la agrupación sacó una carta en la que asegura que Mutio no integra el sector y que solo se reunieron con él en calidad de empresario.
"El único vínculo que mantuvimos con esta persona fue como representante de las muchas reuniones que mantenemos con distintos empresarios, todos aquellos que nos solicitan una reunión o consulta por los más diversos temas. A priori no lo investigamos, por tanto, desconocemos sus intenciones, antecedentes y orientaciones políticas. Martín Mutio no es militante del MPP y nunca colaboró de ninguna manera con nuestra organización. Así como en 2014 se dedicó a publicar mensajes a favor de otros candidatos y en contra del Frente Amplio, desde marzo de 2019 cambió su postura. Eso no lo convierte en un militante político de la organización", dice un tramo de la carta.
Telemundo viajó a Libertad para conocer el silo donde, supuestamente, se cargaron los contenedores con cocaína y también para tener la palabra del dueño. Pero no logramos encontrarlo. Sí pudimos hablar con vecinos de la zona para entender cómo operaba en el lugar.
Ruta 1 y Ruta 45, en los accesos a Libertad. Allí no hay cámaras, rejas ni sereno. El contenedor se cargó durante el día con la soja y luego se colocó dentro del galpón donde permaneció un día y medio, según surge de la investigación de la justicia.
La policía allanó el lugar se llevó documentación, computadoras y celulares y tomó declaraciones a vecinos y empleados.
Según relataron a Telemundo vecinos y familiares del dueño el silo estaba en proceso de ser vendido al ahora procesado Martín Mutio, quien desde hacía un par de meses había firmado compromiso de compra venta. De hecho la justicia constató con la documentación obtenida de los allanamientos que la factura de electricidad figuraba a nombre de Mutio.
El empresario imputado tenía acceso y llave de las instalaciones y en varias ocasiones lo había hecho sin presencia del propietario o ningún otro empleado, asegura la indagatoria.
La justicia que aún no descarta la participación del dueño del silo en la operativa, investiga para saber si la noche del 10 de junio y madrugada del 11 cuando Mutio estuvo junto al contenedor estuvo solo allí o en compañía de algún otro implicado.
