Se le agregaron cambiosen su composición en base a las mutaciones del virus H1N1.
La conferencia “La gripe en el año 2017: novedades y aspectos prácticos”, tuvo lugar la mañana de este martes en la Fundación Peluffo Giguens.
Según explicaron los expertos, este año no se repitió el adelantamiento del pico estacional que hubo en 2016 por las bajas temperaturas registradas desde abril. Las dosis de vacunas llegaron en tiempo y forma. Solo resta que población responda a la campaña mejor de lo que lo ha hecho hasta ahora.
Señalaron que la vacunación, que es la principal estrategia para prevenir la gripe, está subutilizada especialmente en grupos de riesgo como los inmunodeprimidos, y aclararon que se trata de una vacuna inactivada, que no presenta riesgos para esa población.
"En otros países hay vacunas vivas atenuadas pero son intranasales y no inyectables. Estas son inactivadas, es decir, nunca le van a hacer daño", explicó la médica Graciela Pérez Sartori, de la cátedra de Enfermedades Infecciosas de la Facultad de Medicina de la Universidad de la República.
La vacuna que se da en Uruguay, que es la recomendada por la Organización Mundial de la Salud para el hemisferio sur, sufrió algunos cambios este año.
“La vacuna se va cambiando todos los años de acuerdo a los virus que se presume que van a circular. En los últimos años el virus vacunal H1N1 era el mismo porque no habían sucedido modificaciones. Pero este virus tiene la capacidad de mutar, hacer variaciones genéticas, que van a hacer que la vacuna no sea efectiva. Fue lo que sucedió el año pasado. El virus que circuló tenía unas modificaciones genéticas que hacían que la vacunación no fuera tan efectiva”, detalló Pérez.
Pérez Sartori también explicó por qué hay que vacunarse todos los años:
"Hay dos motivos: por un lado los virus pueden tener pequeñas variaciones genéticas. Por otro lado la inmunidad que provee dura entre seis meses y un año por lo cual me la tengo que volver a dar", afirmó Pérez.
