Jóvenes sin facultad auditiva reclaman mayor accesibilidad en general.
Maximiliano Amaral es uno de los jóvenes sordos que participó de la jornada que reunió a otros en su misma situación pero de países como Argentina, Brasil, Chile y Venezuela. Asegura que Uruguay logró algunos avances pero todavía hay barreras y falta de sensibilidad en la población respecto sobre la problemática de las personas sordas.
“Hay que pensar en el mundo en general cuando tiene que acceder a cosas como educación . Ahí debe estar un intérprete: en el salón de clase, o a nivel de salud. Pasa que muchas veces al médico no logramos comprenderlo o comunicarnos. Hay muchas cosas que nosotros no logramos acceder”, explicó Maximiliano mediante lengua de señas.