En tanto, Uruguay avanza en las negociaciones para ser sede de un encuentro que promueva el diálogo.
Uruguay le ofreció a la Unión Europea (UE) ser sede de una cumbre de países que busquen una salida pacífica para la crisis venezolana. El presidente Tabaré Vázquez habló sobre este tema con la alta representante de la UE, quien dijo que está abierta a que Montevideo reciba a varios Gobiernos.
En paralelo, el vicecanciller, Ariel Bergamino, ya se encuentra en Italia negociando una posible mediación de Uruguay, ofreciéndose como sede de negociaciones.
Vázquez señaló que la alta representante de la UE le informó que el bloque no tendría la mayoría necesaria para reconocer a Juan Guaidó como presidente de Venezuela. La jerarca se comprometió a sondear con otros socios de la UE el nombre de Uruguay como sede de un posible encuentro internacional para encontrar una salida para Venezuela.
La vicepresidenta Lucía Topolansky reconoció en una entrevista con En Perspectiva que la presencia de la UE en la mesa de negociaciones puede implicar un cambio de escenario. Aunque Nicolás Maduro ha aceptado la sugerencia de Uruguay y México de volver a apostar al diálogo, Guaidó se niega.
“El peso de la Unión Europea es importante. Se trata de crear un camino de negociación. No hay peor gestión que la que no se hace”, afirmó Topolansky.
