El dinero fue recuperado. La mujer lo tenía guardado en una vivienda que, tras despedirla, sus expatrones le habían prestado para que viviera.
El lunes la Policía recibió una denuncia por el robo de medio millón de dólares de una vivienda de San José.
El dinero estaba guardado en una caja metálica, cuya tranca había sido forzada.
La investigación por este caso rápidamente apunto a una empleada doméstica que trabajaba en el lugar, y que tras varios años de servicio había sido despedida a comienzos de marzo.
La mujer era de confianza de la familia. De hecho, tras despedirla, como no tenía donde vivir, sus ex empleadores le habían prestado una vivienda para que se alojara.
El martes la Policía inspeccionó ese lugar y allí encontraron una valija llena de fajos de billetes de pesos y dólares.
La suma del dinero incautado ascendía a medio millón de dólares.
Con las pruebas en su contra la empleada llegó a un acuerdo con la Fiscalía en la que admitía la autoría de un delito de hurto especialmente agravado. La pena que se le aplicó es la de un año de prisión efectiva y 12 meses de libertad a prueba.
