A partir de una resolución emitida por el actual directorio, se estableció que se planteará esta refinanciación a quienes mantengan deudas al 31 de julio.
A quienes no se acojan a esta refinanciación se les cortaría el servicio a partir de octubre, según explicó la presidenta del ente, Silvia Emaldi, a la prensa tras una reunión con el sindicato de UTE.
UTE estima que son unos 25.000 clientes los que mantienen deudas al momento.