Se robaron objetos personas de los socios y una camioneta que luego apareció abandonada.
La dueña del gimnasio, Lidia Arrabite, explicó: Estábamos en medio de una clase, en la actividad cotidiana de la clase y de repente escuchamos un ruido en el fondo en la zona de la piscina, fui y vi a un delincuente amenazándome, pidiéndome plata. Me amenazaba y daba vueltas. Después aparecen dos más corriendo. Entraron amenazando con sus armas, se fueron metiendo a todas las áreas del gimnasio y llegaron al escritorio donde estaba mi nieto de 13 años y lo encañonan con dos armas y le dijeron que se quede quieto, le pidieron que los acompañe a la casa (que está arriba del gimnasio), aparece mi hija y les pide que lo dejen, ellos lo golpean con el arma. Les dijimos que no tenemos dinero y nos tiraron todo. Por cómo recorrían parecía que ya habían estado antes. A mí me tiraron a la piscina. Siguieron dando vueltas, abriendo cortinas, apartaron cosas para llevarse y algunas al final no se las llevaron. Después se robaron la camioneta y se fueron.
