En total ya son 62 las viviendas que fueron demolidas en la zona.
La jornada de trabajo del personal de la Intendencia y del Ministerio del Interior comenzó sobre las ocho de la mañana, en el pasaje 316 de Los Palomares del Casavalle.
Fueron 24 las casas demolidas este viernes. En varias de ellas vivían integrantes de la banda de Los Chingas. Una de las viviendas pertenecía a la hermana de Mónica Sosa, apodada La Totó y una de las primeras personas de la banda en caer presa.
El de este viernes, fue el día número cien de la intervención de seguridad y de shock urbanístico de la zona, que ahora en los pasajes ya derribados cuenta con luz en la calle. Además, las viviendas ahora tienen contadores de agua y luz.
El trabajo estuvo controlado en todo momento por el sociólogo Gustavo Leal. "Lo que se está haciendo es abrir una calle. Había en este sector personas que hoy están procesadas con prisión por extorsión, que participaron en forma activa en el desalojo de otras personas en esta zona. Las personas que vivían aquí y no tenían antecedentes o vinculación con el grupo criminal han sido realojadas", explicó Leal.
