La joven de 19 años fue asesinada y hallada por su familia a orillas de la Laguna Merín en octubre del 2019.
Lorena se había separado de su ex pareja, Iván Pereira, de 26 años. Tenían dos hijos de tres y cuatro años y estaban juntos desde hace cinco años.
Se habían separado dos meses antes del asesinato tras una discusión y estaban viviendo cada uno por su lado, aunque volvieron a convivir algunos días en las últimas semanas. El lunes 30 de setiembre Lorena fue con su hermana hasta la escuela a llevar a las dos hijas y luego le pidió que la dejara en una esquina.
Bruna Carrasco relató a Telemundo que no le preguntó qué haría pero no dudó que a la hora de la salida de las pequeñas de la escuela estaría allí como siempre, como todos los días. Esa fue la última vez que la vieron. Ese mismo día hicieron la denuncia y al otro día fueron a la casa de Iván Pereira, él tampoco estaba.
El tres de octubre familiares de Lorena hallaron su cuerpo en la Laguna Merín. El hombre había fugado hacia Brasil.
El 7 de octubre el hombre finalmente fue detenido en Brasil luego que las autoridades uruguayas emitieran una orden de captura internacional. Desde entonces permanece detenido en Brasil, pero aún no ha sido extraditado.
La madre de Lorena explicó a Telemundo que buscan que se haga Justicia por la muerte de su hija y además quieren agilizar los trámites para la tenencia de las dos niñas que la pareja tenía en común.
"Estamos luchando por justicia. Lorena estaría cumpliendo los 20 años. La fiscal me dijo que ya se había mandado a traducción para Brasil, pero todavía no se sabe nada. Me dijo que cuando él estuviera en territorio uruguayo, ella sería la primera en avisarme", dijo la mujer.
Dijo que las niñas están bien, pero ambas preguntan por sus padres: "Están bien, pasan preguntando por la madre y también por su papi. Nosotros les decimos, que si papi no le hubiera hecho daño a mamita, estarían los dos acá. Es muy difícil y más con la chiquita, que todavía tiene tres años y no entiende. No sabemos cómo hacerla entender que mamita está en cielo. Ya la hemos llevado al cementerio, le hemos explicado que está ahí y no va a vivir más con nosotros. Yo les dije que van a vivir conmigo, el tata, los tíos, los primos, con todos. Hemos sacado fortaleza de donde no hay, hemos pasado las miles, no da para creerlo, no tenemos respuesta de por qué lo hizo. A mí me tiene todo trancado porque quiero hacer los trámites de tenencia y pensión de las niñas y no me sale. Ando como en las nubes que no sé qué más voy a hacer".
