Dictaminaron 120 días de prisión preventiva para el sindicalista y su esposa.
El fiscal Rodrigo Morosoli presentó sus descargos contra Marcelo Balcedo y Paola Fiege basado en parte en los argumentos del juez argentino que solicitó la extradición por extorsión, apropiación indebida y narcotráfico. Ambos son investigados por lavado de activos, contrabando y tráfico de armas interno.
Para Morosoli queda claro en esta primera etapa de la investigación que se constató una adquisición de bienes inconsistente con los ingresos que tienen ambos, un ingreso ilegal de vehículos y animales exóticos y el tráfico interno de armas sin habilitación.
Durante un año –con opción a otro más– la Fiscalía continuará investigando para reunir las evidencias para acusar y llevar a juicio oral y público, hasta la sentencia. Mientras continúa la investigación, el fiscal consideró que Balcedo, recluido en Cárcel Central y Fiege deberán permanecer en la cárcel. Morosoli solicitó la prisión preventiva por 150 días. El juez de Crimen Organizado, Pablo Benitez, dispuso 120 días.
“La prisión preventiva es una medida cautelar, nunca es una medida de pena. Era la única medida idónea para el peligro de fuga de estas personas que contaban con recursos”, explicó Morosoli.
Interpol informó que hasta la fecha se embargaron propiedades por el monto aproximado de 5.526.200 dólares, vehículos incautados y/o embargados por un monto aproximado de 2.270.800 dólares y cuentas bloqueadas y/o cofres incautados por un monto aproximado de 6.740.968 dólares. Se establece que el dinero invertido en la compra de propiedades, vehículos y refacciones lujosas en la chacra “El Gran Chaparral” no ingresaron al país a través del sistema financiero y tampoco se detectaron actividades rentables de Balcedo ni Fiege.
Durante este mes el fiscal tomó testimonio a cerca de 20 personas que trabajaban en la chacra.
Contaban con cuatro niñeras con sueldos promedio de $20.000 aunque por fuera recibían pagos en efectivo hasta 3.000 dólares. Un chef a quien se le pagaba 4.000 dólares, un personal trainer 5.800 dólares, tres empleadas domésticas 2.000 dólares cada una, tres porteros $30.000, nueve jardineros y mantenimiento $ 44.000 cada uno, un cuidador de animales $60.000 y un un cuidador del invernáculo $27.000. En todos los casos el aporte al Banco de Previsión Social era por lo mínimo y el resto en dólares en efectivo.
Morosoli reveló también que en el allanamiento a la chacra donde se encontró la documentación y datos con todos los cofre fort, el sobre decía: “Abrir si me pasa algo”.
