El hecho ocurrió en marzo de 2018. La fiscal catalogó el caso como un femicidio.
La víctima tenía 87 años y su hijo 56. Tal como informamos, el caso ocurrió el 16 de marzo del año pasado en una precaria vivienda de Malvín Norte.
La mujer murió una semana después del ataque, tras permanecer internada en CTI.
La fiscal del caso, Sabrina Flores, tras la investigación concluyó en que el hombre vivía con su madre desde principios de la década del 90 y ejercía violencia física, psicológica y económica sobre la mujer.
La anciana escribía apuntes de los maltratos físicos a los que era sometida.
Los propios vecinos tenían conocimiento de estos hechos y dijeron haber visto en varias oportunidades a la mujer con lesiones.
El 16 de marzo de 2018 el ahora condenado atacó brutalmente a su madre. Le dio golpes de puño y la dejo tirada en el piso.
Luego llamó a su sobrino, nieto de la víctima, al que le dijo que la mujer se había caído y estaba golpeada.
Al lugar llegó una asistencia móvil y el victimario dijo a los médicos que la mujer se había golpeado al caer. Dentro de la ambulancia la mujer casi inconsciente, le dijo al médico que su hijo la había atacado. Aseguró además que era una práctica habitual.
La mujer fue ingresada a la mutualista Medica Uruguaya donde permaneció internada durante una semana hasta que finalmente falleció debido a las serias lesiones que presentaba.
La fiscal Sabrina Flores pidió una condena de 28 años de prisión por la comisión de un delito de homicidio especial y muy especialmente agravado por haberse cometido contra su madre, y el agravante por cometerse contra una mujer por motivos de odio, desprecio y menosprecio por su condición de tal.
La jueza penal sentenció a 26 años de prisión para JGFR, que no tenía antecedentes penales.
