La dueña de una whiskería de Guichón fue imputada por un delito de trata de personas especialmente agravado

Deberá cumplir seis meses de prisión preventiva tras retener a ocho mujeres extranjeras.

La mujer de 52 años fue imputada por un delito de trata de personas agravado, porque las víctimas son inmigrantes.

Deberá cumplir 180 días de prisión preventiva a la espera de su condena, a partir de las pruebas presentadas por la fiscal Silvia Lovesio.

En la puerta del juzgado varias mujeres fueron a respaldar a la dueña de esta whiskería de Guichón. Entre ellas estaba otra mujer que había sido detenida y luego liberada.

La ahora imputada había sido detenida el martes por la policía de Paysandú y condenada en un juicio abreviado por comisión de un delito de tráfico ilícito de sustancias estupefacientes.

Durante el allanamiento a su local se encontró marihuana, 63 municiones calibre22, varios dispositivos de archivos informáticos, celulares, pesos y dólares.

La mujer fue traslada de inmediato a Montevideo para ser indagada por la causa sobre trata de personas, porque desde hace meses se desarrollaba una investigación de la Dirección de Crimen Organizado e Interpol  que comenzó cuando Inteligencia policial descubrió un llamado a inmigrantes para trabajar en una whiskería.

Las víctimas son ocho mujeres cubanas, dominicanas y venezolanas, de entre 25 y 40 años.

Fuentes de la investigación afirmaron a Telemundo que es una investigación “compleja” y que “recién empieza”.

Además, la fiscal Sylvia Lovesio fue amenazada de muerte por la dueña de la whiskería de Guichón. Fue durante la audiencia en la que quedó imputada por trata de personas.

La dueña de la whiskería de Guichón amenazó de muerte a la fiscal Silvia Lovesio, según informó Radio Sarandí y confirmó Telemundo.

Fue delante de la jueza Marcela Vargas, durante la audiencia de formalización por trata de personas.

La magistrada dispuso que la constancia de la intimidación fuera derivada a la fiscalía de flagrancia.

Dentro del juzgado la audiencia “fue larga y con mucho debate”, según revelaron fuentes de la fiscalía.

También indicaron que el grupo de mujeres que protestó afuera en apoyo a la imputada no pertenece al núcleo de víctimas y que intentó intimidar a la fiscal desde su llegada a la sede judicial.


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