Si son encontrados culpables podrían ser procesados por encubrimiento.
Este jueves se realizó la audiencia de formalización de un joven de 19 años, de iniciales G.B. Conocía al Kiki del barrio El Monarca y le cortaba el pelo porque ese es su oficio.
Declaró que luego del crimen de la cajera del supermercado lo encontró en la plaza. Dijo que Pastorino le pidió ayuda y que él se negó pero terminó aceptando bajo amenazas.
Por eso le pidió a su madre las llaves de una casa que tienen en Solís de Mataojo. Le dijo que iba a ir con unos amigos. En esa casa comieron milanesas, según declaró el joven. Su madre, que sospechaba que algo estaba pasando, lo llamó al día siguiente y le mintió que su padre estaba muy enfermo.
Por eso el Kiki lo trajo de regreso y lo dejó en el km. 27 de Ruta 8. A la espera de otros testimonios y pericias, la jueza Marcela Vargas dispuso 90 días de prisión domiciliaria para este joven de 19 años. Si finalmente fuera acusado por encubrimiento podría pasar un año en prisión.
El otro indagado, el adolescente de 15 años que estaba con el Kiki en el rancho de Don Márquez cuando fue detenido, también pasó a prisión domiciliaria por 60 días mientras se investiga.
Este viernes se conocieron otros detalles de la huida de Christian Pastorino. Tras matar a la cajera el sábado, estuvo hasta las 4:00 de la mañana del domingo en un baile cerca de Villa García, organizado a través de redes sociales. Testigos declararon haberlo visto bebiendo y bailando.
