El hombre que mató a la niña de San Carlos fue imputado por el homicidio y por dos homicidios más en grado de tentativa. Otras tres personas fueron procesadas en el marco de esta investigación.
El domingo, actuando como sicario, llegó a una casa donde funcionaba una boca de venta de drogas en la avenida Rocha, de la ciudad de San Carlos en Maldonado.
Lo habían contratado para matar al dueño, pero se equivocó. Comenzó a dispararle a un hombre que estaba afuera, que había arrendado una pieza.
Lo siguió hasta adentro de la casa en el momento en que la hija del hombre había escuchado los disparos y salía de la habitación. Quedó en la línea de tiro, y un disparo la alcanzó en el tórax.
Natasha, de 7 años, murió poco después en un hospital. Su padre tenía apenas un roce de bala y el homicida huyó.
El asesino escapó al monte pero fue capturado el martes, cuando vecinos lo vieron en una casa y llamaron al 911.
Este miércoles la justicia aceptó el pedido de la fiscal y lo formalizó por homicidio a título de dolo eventual, por el caso de la niña, y dos homicidios agravados por premeditación en el grado de tentativa.
Se dispuso 180 días de prisión preventiva.
El padre de la niña fue imputado por desacato agravado, ya que tenía prohibido acercarse a ella por una denuncia de violencia doméstica. Es primario y se lo condenó a 90 días de prisión domiciliaria nocturna.
El dueño de la casa donde funcionaba la boca, de iniciales A.D.N., a quien el sicario quería matar, fue condenado a 15 meses de prisión por asistencia al narcotráfico y hurto de energía eléctrica.
Por un allanamiento vinculado al caso, se condenó a Álvaro Fabián Galván, con varios antecedentes, a un año de prisión por porte de arma por reincidente y tráfico interno de armas.
