El hombre de 53 años fue alcanzado por una bala perdida en un tiroteo entre Policía y delincuentes.
A las nueve de la noche del domingo dos delincuentes asaltaron el autoservicio Kinko ubicado en Tomás Diago y Jaime Zudáñez, en Pocitos.
Se llevaron dinero y se fugaron en un taxi pero fueron perseguidos por motos de una empresa de seguridad.
Cuando los delincuentes se dieron cuenta se bajaron del taxi y siguieron la huida a pie. Uno de ellos intentó entrar a un edificio de apartamentos y se produjo un intercambio de disparos con la Policía.
Una bala alcanzó a un turista brasilero que estaba en un apartamento del primer piso en Gestido 2778, detrás del vidrio de la ventana.
La bala le cortó la arteria femoral izquierda y le provocó un shock hemodinámico.
Con pérdida de sangre y en estado delicado fue llevado al Sanatorio Americano donde pese a las transfusiones y a las maniobras de reanimación, falleció cerca de la medianoche.
Julio César de Medeiros, de 53 años, había llegado a Uruguay como turista con su esposa y tenía previsto regresar a su país este lunes.
En el lugar del tiroteo, Policías de la Unidad de Respuesta de la Zona 3 detuvieron a uno de los delincuentes, de 25 años, que tiene una herida de bala en su mano derecha.
El otro rapiñero, de 27 años, fue detenido por guardias de seguridad y fue entregado a la policía.
Se encontró una mochila con el dinero robado, dos pistolas 3.65 con cuatro y cinco municiones vivas, y un revólver de plástico. La justicia dispuso periciar las armas de los delincuentes y de los Policías para determinar el origen de la bala que mató al turista.
El Ministerio de Turismo publicó un mensaje lamentando lo ocurrido:
