“¿Pueden ustedes mirar a sus hijos? ¿Pueden verlos crecer? ¿Pueden escucharlos, verlos sonreír? ¿Pueden abrazarlos? Yo ya no puedo"; la carta de una madre que pide no eliminar la tolerancia cero de alcohol en sangre

Se trata de Carolina, madre de un adolescente de 15 años que perdió la vida luego de ser atropellado por un conductor alcoholizado.

En la mañana del domingo 7 de abril de 2019 los papás de Nicolás de 15 años recibían una llamada telefónica que su hijo había sufrido un accidente: había sido atropellado mientras esperaba un Uber para volver a su casa. Casi dos años después Carolina, su mamá, escribió una carta que hizo pública en medio del debate político sobre el consumo del alcohol y la prohibición de manejar.

“Nicolas Medina Fernández, el Cala, mi hijo de sólo 15 años murió atropellado en la rambla de Kibon por un hombre que conducía alcoholizado, con 1,57 gramos de alcohol en sangre. Y si, muchos pensarán que esto pasó estando en vigencia la ley de tolerancia 0. Tienen razón por eso vuelvo a preguntarme: ¿Cómo pueden pensar siquiera que volver hacia atrás no traerá consecuencias terribles?¿Entienden que se nos dirá “pueden tomar y manejar”? Sólo deberán parar cuando su nivel de alcohol en sangre llegue a 0,3...”

Carolina hace referencia a un proyecto de ley del senador blanco Sergio Botana, que incluye un artículo que establece en 0,3 el límite, cuando actualmente es cero.

La mamá del joven atropellado sigue diciendo: “Hace unos meses leí que esta medida afectó mucho a productores y bodegueros, que privaba a los consumidores de la copa del vino diario sin culpas y que todo esto significaba un gran problema… vuelvo a hacer la misma pregunta que hice hace un tiempo atrás: ¿pueden ustedes mirar a sus hijos? ¿pueden verlos crecer? ¿Pueden escucharlos, verlos sonreír? ¿pueden abrazarlos? Yo ya no puedo, no lo tengo, Nico no está, 1,57 gramos de alcohol en sangre me lo arrancó de las manos".

El conductor del auto fue imputado como autor de un delito de homicidio a título de dolo eventual, condenado a la pena de cuatro años y once meses de penitenciaría. Este hombre de 26 años, profesor de educación física, había tomado una botella de cerveza, luego otra y luego otra. Metros antes de atropellar a Nicolás se había dormido en un semáforo y había sido despertado por un chofer que pasaba, quien alertó a la Policía, pero el conductor alcoholizado siguió su marcha y a las pocas cuadras se llevó la vida de Nicolás.


Las Más Vistas