"Son estas personas que encuentran una señora que está sola, le brindan cariño, compañía, ayuda, ganan su confianza y después se endulzan con las cosas y se quieren quedar con todo"

Cristina Jones de 78 años desapareció el 16 de junio de 2018 en Punta del Diablo, su hijo se sorprende con los puntos de contacto con el caso de la mujer asesinada en La Esmeralda.

Cristina Jones se fue a vivir al barrio Rivero de Punta del Diablo con su esposo y se quedó sola después de un divorcio. Si bien no es extranjera como Schroll, vivió en Estados Unidos y trabajó en Montevideo en la embajada británica y en la delegación europea. Tenía 78 años cuando desapareció el 16 de junio del año pasado. Los hijos se enteraron después, cuando la llamaron por su cumpleaños.

Su casa, donde encontraron a un hombre que dijo ser el casero viviendo con su familia, fue revisada dos veces por la Policía Científica. El casero dijo primero que ella se había ido a Punta del Este pero luego cambió y dijo que se había ido a Paysandú en un auto alquilado. Un vecino asegura que la escuchó hablar el 24 de junio, ocho días después de la fecha en la que se habría ido.

También escuchó que llegó un auto y luego se fue. En su caja de ahorros quedó la jubilación sin tocar. El caso está en la fiscalía del Chuy, aunque el fiscal del caso de Janice Schroll dijo que quiere investigar si hay vinculación entre ambos hechos.

El testimonio de Francisco Ravecca, hijo de Cristina:

Mi madre desapareció el año pasado, cuando nos enteramos fuimos con mi hermano a hacer la denuncia. Cuando llegamos nos encontramos con que había una persona viviendo en la casa de mi madre, un autoproclamado "casero". Muy similar al caso de esta señora (Janice Schroll), es increíble lo parecido que es todo el caso. Según este autoproclamado "casero" mi madre lo llamó. Se ve que era uno de la vuelta, hacía changas, arreglaba alguna cosa, mi madre estaba sola viviendo allá.

Se ve que entró en una relación de confianza con esta persona y según esta persona mi madre le pidió que la llevara ala parada de ómnibus porque se iba a Punta del Este a visitar a mi hermana, y le dejó la casa y los perros. Mi madre nunca haría eso. Vecinos de punta del Diablo nos confirmaron que esta persona había vendido muebles, garrafa, cocina de la casa de mi madre.

Tanto Aquistapace como otra vidente, los dos nos dijeron que estaba muerta, enterrada cerca de la casa. Nos dijeron que estaba tapada con madera, igual que esta otra señora. Yo creo que hay un modus operandi, son estas personas que encuentran una señora que está sola, les brindan cariño, compañía, ayuda, ganan su confianza y después se endulzan con las cosas y se quieren quedar con todo.

El hombre imputado por el asesinato de Janice Schroll, será investigado por otras desapariciones en Rocha


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