La bomba era de utilería y la hizo una estudiante de comunicación de 23 años para un ejercicio de su facultad.
En la tarde del domingo Avril Juárez, estudiante de comunicación, volvía a su casa en Ciudad de la Costa. Cuando manejaba por Carrasco, su auto, un Fiat 600 verde, se le quedó.
Como pudo, lo empujó y lo dejó en Leborne y Barradas. Este lunes, la joven llegó al lugar donde dejó su auto y se encontró con una sorpresa mayúscula.
"Aparentemente se encontró un explosivo en mi auto, que ese explosivo fue una entrega que hice para facultad, porque estudio comunicación. Era un juego de televisión que tenías que pasarte una bomba. Aparentemente un vecino advirtió que había un explosivo y ahora está esta situación. Me quedó bastante realista aparentemente. Nunca me esperé esta conmoción", relató la joven estudiante.
Avril, ayudada por su hermana, desarmó la bomba de utilería que había hecho y la dejó en el piso. Un efectivo del Ejercito corroboró que efectivamente se tratara de una bomba de utilería y allí terminó el operativo.
