Los delincuentes se hicieron pasar por funcionarios de Antel.
En este sentido, Gladys Rodríguez, víctima del copamiento, contó a Telemundo lo sucedido:
“Llegaron diciendo que tenían que trabajar por Antel porque había una interferencia hasta la esquina. No entraron ni siquiera por la puerta, subieron por el balcón. Vinieron con escalera, herramientas, todo. Entraron, agarraron el aparato del wifi y cuando me doy vuelta me agarran a mí y a mi esposo. Yo lo único que pedí es que a mi esposo no le hicieran nada porque es una persona enferma y después me lastimaron toda. A mi esposo se lo llevaron al dormitorio y la ataron los pies, las piernas y las manos, y le pedían que nosotros le diéramos el revólver de la casa. Me esposo le dijo que no éramos asesinos ni nada, que acá no había un arma. Revolvieron todo. No querían ningún electrodoméstico, me dijeron que querían alhajas y plata. Le dije que no tenía plata, pero lamentablemente pudieron llegar al cofre. Me metieron en el baño y me dejaron atada ahí. Y luego trajeron a mi marido y lo dejaron tirado en el piso”.
