El proyecto busca convertir a los hospitales públicos en una primera contención, para permitir al Vilardebó concentrarse en los pacientes más complicados.
El hospital Pasteur presentó el proyecto para una nueva sala de salud mental, con capacidad para ocho pacientes, y una posible extensión a uno o dos más, según las necesidades. “Los hospitales públicos van a funcionar como un primer nivel de contención para que el hospital Vilardebó se concentre en los pacientes más complicados”, explicó el director de la institución.
Se presentaron también los avances del nuevo edificio del Pasteur. Estará conectado con el viejo edificio, que es de 1849 y hace muchos años que no tiene mantenimiento. “Lo mejor del Pasteur es su gente, pero no su edificio, dijo el director.
