La líder del equipo económico del nacionalista Luis Lacalle Pou habló de cuidar lo que se ha hecho en los últimos gobiernos y corregir ciertas "luces amarillas".
Azucena Arbeleche realizó un análisis del programa económico de la candidatura del Partido Nacional y cómo según ella encaja con el perfil que viene persiguiendo el país en los últimos períodos de gobierno. La líder del equipo económico de Luis Lacalle Pou hizo mucho énfasis en la importancia del diálogo y de no romper con lo construido, sino tratar de corregir lo que denominó “luces amarillas”. Fue, en conclusión, muy en línea con “la positiva” instaurada por Lacalle Pou.
Arbeleche afirmó que está de acuerdo con los datos de la encuesta de Cifra que mostró a un 56% de los uruguayos conformes con la situación económica del país en la actualidad. Sin embargo, habló de esas luces amarillas con las que hay que tomar acción antes de que se conviertan en rojas. Se alejó de los dichos de Pedro Bordaberry, quien afirmó que el déficit está fuera de control, y sostuvo que en realidad necesita solamente una corrección gradual. “El gasto real tiene que crecer menos que el producto real, si eso no sucede sí se encenderá la luz roja”, comentó Arbeleche.
Ante la pregunta de si su nombramiento marcó un abandono del Partido Nacional de las políticas neoliberales de antaño, la economista declaró que esa línea ya estaba establecida en el programa antes de su entrada en escena. Además, remarcó: “No podemos pensar que cada 1º de marzo se refunda la nación. Es una gran casa que la construimos entre todos los uruguayos. No se puede tirar todo abajo”. Nombró entonces logros de gobiernos previos al Frente Amplio que el gobierno de izquierda mantuvo, como las AFAP y sobre todo la salida que se eligió para la crisis de 2002, y señaló que de la misma manera un gobierno del PN continuaría con las cosas que consideran bien hechas.
“El gasto tiene que seguir creciendo, pero menos que lo que crece el producto”, comentó Arbeleche. Dijo también que gran parte de ese gasto se está administrando ineficientemente, sobre todo en las empresas públicas. Consultada sobre los dichos de Mujica de que en la locura de la campaña se lanzan propuestas de tal manera que hacen pensar en Alicia en el país de las maravillas -en particular se refería a planteos de reducción de impuestos y a la vez aumento de políticas sociales-, la economista contestó que corrigiendo ese gasto ineficiente ya se podría ahorrar en 500 millones de dólares.
Un punto clave de la entrevista fueron las repetidas menciones de Arbeleche de que en los gobiernos del FA “se ha dado una mejor distribución del ingreso, pero no de oportunidades”. Señaló que la clase media baja gana poco y paga demasiado IRPF, por lo que el PN plantea dividir en dos la última franja de ese tributo, de manera que la más baja deje de pagar y la más alta pase de pagar el 10% a pagar el 5%. En ese mismo respecto, afirmó que los planes de asistencia social “no se van a tocar”. “Lo importante es la igualdad de oportunidades de los ciudadanos”, comentó Arbeleche.
