En Código País, el vicepresidente de la República se refirió al recorte del gasto público, a la suspensión del Antel Arena y a la deuda de Ancap.
Abrimos la entrevista con las palabras de Tabaré Vázquez en conferencia de prensa, haciendo referencia a la cancelación de la deuda con Venezuela y los acuerdos comerciales alcanzados:
¿Usted era el principal negociador con Venezuela?
Sí. Habíamos venido negociando desde hace algunos meses, primero a nivel de vicepresidentes. Incluso en el velatorio de Galeano que vino el vicepresidente de Venezuela tuvimos una reunión. Yo estuve en Bruselas la última vez con el vicepresidente, estuvimos haciendo un repaso y finalmente el empujón importante fue la conversación entre Maduro y Vázquez la semana pasada, que habilitó la llegada de la delegación. Estuvimos trabajando en paralelo para ajustar los acuerdos.
¿Fue complicada la negociación?
Había un mandato de los dos presidentes para llegar a una solución (...). Estaban dispuestos a comprar todo el alimento posible, con precios convenientes. Estuvimos trabajando por la mañana en las condiciones de arroz, de queso, de pollo (...). Hay un elemento que me parece muy importante, nosotros tenemos que cuidar nuestro mercado, por eso es muy importante que se cumpla y por eso es muy importante el precio. Nosotros nos preguntábamos por qué Venezuela compraba leche a Nueva Zelanda y no a Uruguay. Si nosotros nos pasamos en el precio, a veces puede ser un desastre para el país. Hay que tener un equilibrio entre un buen precio y tener continuidad en el tiempo.
La oposición destacó el acuerdo pero por otro lado dicen que es un salvataje para Ancap. ¿Quién paga esta deuda?
La paga Ancap, porque en definitiva lo que hace Ancap es sustituir una deuda de largo plazo dolarizada por una deuda de mediano plazo en Unidades Indexadas. Sustituye una deuda con Pdvsa. Son 260 millones de dólares en UI, que sustituye una deuda de 440 millones de dólares con Pdvsa por una deuda en UI. El camino de la empresa es lograr pesificar la mayor parte del pasivo (...).
Hace diez años que el gobierno viene tratando de desdolarizar la economía, sin embargo Ancap no hizo eso...
En realidad se hizo todo lo que se pudo (...). Todo lo que sea posible, yo creo que hay que pesificarlo, pero manda también el mercado. Ahora el ministerio de Economía y Ancap trabajan en la búsqueda de un mecanismo de pesificación de la deuda.
¿Cómo evalúa las críticas dentro del Frente Amplio?
Yo hace tiempo que por un tema de salud mental no le contesto a Esteban Valenti. (...) Estaba claro que un proceso de inversión tan importante era imposible medirlo en el corto plazo, esto se mide en el mediano plazo (...). Hubo una inversión muy importante y la situación que quedó es que tenemos una empresa que está con energía limpia, que tiene producción de biocombustible, que tiene una refinería que prácticamente no necesita inversiones.
Es difícil entender la posición de la Federación Ancap porque tuvo momentos en donde respaldó la gestión y en donde criticó la gestión. Yo no tuve explicación para muchas de esas posiciones. Hubo momentos críticos, difíciles, donde prácticamente quedamos paralizados en más de una oportunidad por medidas que se tomaron. Me resulta difícil entenderlos.
El patrimonio siempre es la relación entre el activo y el pasivo, acá lo importante es que el activo fue creciendo y el pasivo se fue reduciendo y se fue mejorando el patrimonio.
Tengan presente que hemos trabajado con tarifas topeadas. Dentro de esas tarifas tenemos una carga de impuestos de un 32% que se transfieren directamente al precio central, Ancap transfirió 126 millones de dólares el año pasado para el subsidio del boleto, entonces estamos hablando de que hay una estructura de costos que no pueden incorporarse a la tarifa porque hay una carga importante de impuestos. Yo creo que tiene que haber un cambio.
Usted denunció a dos empresarios por difamación, el juez lo archivó ¿qué opina?
No sé si lo archivó. Estaba a consideración del juez pero vino la feria judicial y no hubo pronunciamiento. Yo no voy a decidir lo que va a decidir el juez, la fiscal venía muy firme con el planteo.
Los números del presupuesto han dado mucho qué hablar, con respecto a la suspensión del Antel Arena. ¿Está de acuerdo?
El gobierno decidió establecer un nuevo cronograma para la obra, no es que no se vaya a hacer. Los dos primeros años de gobierno van a ser años de cierta cautela en el gasto, sobre todo apuntando a inversiones en OSE, en carreteras... Pero no vamos a dejar de hacer el Antel Arena (...). Hemos acordado que va a haber una inversión en las empresas públicas de 300 millones de dólares por año y después habrá inversiones en educación, cultura, infraestructura portuaria, vías férreas, inseguridad, etc.
¿Le sorprendió la repercusión del Antel Arena?
Si a mí me preguntan qué es lo prioritario, yo creo que es más importante que haya agua potable y una buena infraestructura, que hacer el Antel Arena. Yo soy tremendamente defensor del Estado, pero creo que el Estado tiene que estar en las áreas que son absolutamente estratégicas.
La gente no sabe pero todos los lunes el gabinete se reúne durante una hora y después hay otra hora de discusión política sobre temas que tienen que ver con el presupuesto, con determinadas situaciones, como la del sector lácteo. La verdad es que venimos funcionando con un equipo bastante aceitado.
Astori dijo faltó coordinación en los gastos en la administración de Mujica, ¿qué opina?
Él era el vicepresidente de la República, no sé cómo funcionaba el gabinete en ese momento, pero hay una ley en la Rendición de Cuentas que establece que todas las empresas públicas tienen que pedir autorización para sus gastos. Por lo tanto, cada una de las inversiones fueron informadas al gobierno para que se diera el aval.
¿Cuál es la situación de la economía uruguaya?
La situación que tenemos es que la economía uruguaya está viviendo un momento de desaceleración, sobre todo por el impacto de la situación económica que tienen nuestros socios regionales. Pero desaceleración no quiere decir freno. Estamos en un momento de cautela en el sentido de mirar cómo está la situación a nivel del mundo, si podemos sustituir algunos de nuestros mercados por mercados nuevos, como India o África.
¿Está de acuerdo con las pautas salariales?
Sí, las dudas tienen que ver con si la cláusula gatillo es efectivamente una protección frente a un posible disparo de la inflación. El primero que tiene que hacer los mandados es el gobierno que tiene que controlar la inflación (...).
¿Qué piensa del paro general que plantea el Pit-Cnt?
Yo entiendo que haya cierta preocupación, en este caso creo que está relacionada a la cláusula gatillo pero esto se arregla con el diálogo. Hay una relación permanente entre el Pit-Cnt y el gobierno, hay un buen diálogo a través del Ministerio de Trabajo.
¿Qué opina del TISA?
Nosotros vamos a tener una reunión en el gabinete cuando el FA nos entregue una posición al respecto. Hay grupos que han manifestado su oposición, el Pit-Cnt también tiene una posición contraria y yo voy a reservar mi opinión para volcarla al gabinete.
Ha trascendido que su sector tiene pensado elevar algún tipo de propuesta de inversión al gobierno. ¿Está de acuerdo?
Yo mismo he pensado -y tengo algún economista que trabaja conmigo- en poder acercar propuestas. Porque nosotros tenemos este debate del presupuesto tiene la característica de ser un debate colectivo, entonces cada uno tiene una visión. A mí me lleva a pensar que hay que revisar algunas propuestas. Por ejemplo, la ley de inversiones ¿no hay que direccionarla? Porque hasta ahora ha jerarquizado otras cosas. Pienso que hay herramientas que hay que redireccionar, hay que pensar si seguimos incrementando las reservas internacionales o si ese dinero lo volcamos. (...). Esto hablando de establecer un tope, decir: hasta aquí llegamos, volquemos esto otro al país.
