Conocimos la organización y hablamos con uno de los médicos sin frontera que encontró su vocación trabajando en zonas de conflicto.
Por segunda vez en una semana, la delegación de Médicos sin Fronteras fue bombardeada en el sur de Yemen. Muchas veces, cuando suceden estos ataques, la delegación es obligada a retirarse del lugar por falta de seguridad y la zona queda desprotegida.
Médicos sin Fronteras es de las pocas organizaciones médicas que brindan asistencia humanitaria.
Víctor Píriz es médico y desde 2005 comenzó a trabajar en esta organización en zonas de conflicto. Su primera misión fue en Ecuador en un hospital de VIH.
"Me he enfrentado a la desesperación y a la desazón".
"A veces solamente con acariciar y contener la persona ya cambia".
Píriz tuvo que regresar a Uruguay tras el fallecimiento de su padre y su última misión fue en Bangladesh en 2017. "Estoy deseando salir nuevamente", confiesa.
