El Airbus A320 de la compañía Germanwings había salido de Barcelona y se dirigía a Dusseldorf.
El accidente se produjo en los Alpes de Francia, al sur del país. La aeronave pertenecía a la aerolínea Germanwings, y llevaba 144 pasajeros a bordo y seis tripulantes. Realizaba el trayecto entre Barcelona y la ciudad alemana de Dusseldorf, de ahí que en el vuelo viajaran un elevado número de alemanes pero también de turcos y españoles. Entre ellos había dieciséis estudiantes alemanes que habían estado de intercambio.
Desde París, el presidente francés Francois Hollande dijo temprano que las condiciones del accidente hacían pensar que no había sobrevivientes, y de hecho no los hubo. El Airbus A320 despegó de Barcelona a las 10 de la mañana (hora local) y 47 minutos después se emitió una llamada de emergencia. En un primer momento se informó que había sido enviado por el piloto pero fuentes oficiales confirmaron más tarde que fue emitida por la torre de control de Alta Provenza tras perder comunicación con la tripulación.
Todo apunta a que el avión se encontraba a 6.800 pies cuando saltó la alarma, mientras que la montaña contra la que se precipitó tendría una altura de 9.000 pies. Dos helicópteros de la Dirección General de Tráfico francesa que salieron a buscar el vuelo, confirmaron que el avión se estrelló enviándose de inmediato varios equipos de rescate a la zona.
El Ministerio del Interior francés informó por su parte que las condiciones meteorológicas no eran especialmente malas y que los restos del avión fueron localizados exactamente a 2.000 metros de altura.
Je veux exprimer aux familles des victimes de cet accident aérien toute ma solidarité. C'est un deuil, une tragédie.
— François Hollande (@fhollande) March 24, 2015
