El dolor de perder a un ser querido y no saber dónde está

Teledoce.com presenta tres historias que darán lugar a una profunda reflexión. Tres familias que se encontraron con que los restos de sus seres queridos no estaban donde deberían estar.

El trabajo periodístico de Gabriela Santini recorre las historias a las que debieron afrontarse las familias de Nelson Gásperi y Alex Aguiar tras sus respectivos fallecimientos. Además, la familia Sabella se encontró con la faltante de varios de los cuerpos de sus seres queridos en su panteón familiar.


Nelson Gásperi falleció de un paro cardiorespiratorio el 16 de febrero de 2016. Pero mucho más inesperado aún que su muerte fueron las circunstancias que siguieron a su deceso. En el sepelio su familia advirtió que el cajón y las coronas no coincidían con las del velorio y allí empezó un largo camino para dar con sus restos. Dos ediles nacionalistas hicieron un pedido de informes al Servicio Fúnebre Municipal.


La familia Sabella se enteró por un conocido que estaban rematando un panteón suyo en el Cementerio Central en el que estaban los restos de 32 familiares. El aviso del remate decía que estaba vacío y recién pintado. Tras el reclamo aparecieron solamente los cuerpos de 9 de los familiares.


Alex Aguiar falleció el 31 de enero de 1999 de cáncer. Una década después sus hijas Jessica y Solange se propusieron cumplir con su deseo y esparcir sus cenizas en el arroyo Pando. Pero no sería tarea fácil: la urna con los restos de su padre en el Cementerio del Buceo estaba extraviada.


Las Más Vistas