La víctima se llamaba José Luis Madruga, tenía 53 años y trabajaba como cambista en la línea divisoria.
Dos hombres con antecedentes penales fueron procesados en calidad de coautores de un homicidio muy especialmente agravado. Otro hombre fue procesado por encubrimiento y a dos mujeres y dos hombres los procesaron sin prisión -ya que no poseían antecedentes penales- también por encubrimiento.