Según se supo, todo sucedió en el hall del Hotel Ramada, en Suwon.
Los jugadores volvían de cenar, se cruzaron con los uruguayos, intercambiaron palabras y hubo golpes de puño. “Intercambiaron palabras, se dio un forcejeo y algún golpe de puño pero nada más que eso”, dijeron a Telemundo.
“Nada de garra charrúa, acá es vino tinto”, dijo al parecer uno de los jugadores venezolanos. Se aguarda por sanciones, tanto para la Celeste como para la Vinotinto.