"No aplaudimos lo que sucede en Venezuela, pero tampoco hostigamos con una comunicación cada 15 días", dijo el ministro interino.
Argentina, Colombia, Chile, Paraguay y Perú denunciaron ante la Corte Penal Internacional al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, por crímenes de lesa humanidad.
El Gobierno uruguayo marcó su postura sobre la situación de Venezuela y surgieron críticas desde todo el espectro político.
Abordamos el tema junto a Ariel Bergamino, ministro interino de Relaciones Exteriores.
La postura de Uruguay con respecto a la grave situación que vive Venezuela es clara, firme y consistente. La situación es lo suficientemente grave como para no agravarla más. La comunidad internacional, en el marco de sus competencias, tiene que ayudar a que se genere un clima adecuado para que los venezolanos resuelvan sus problemas.
En la medida de nuestras posibilidades, ayudamos a generar el clima de serenidad y respeto mutuo para resolver problemas. Es difícil y no lo hemos logrado. Y los múltiples intentos que ha desplegado la comunidad internacional también han fracasado. Pero hay que insistir, no hay otra.
Lo que está sucediendo es muy grave. Me duele mucho lo que pasa. No aplaudimos lo que sucede en Venezuela, pero tampoco la hostigamos con una comunicación cada 15 días. Todos los venezolanos son responsables de lo que pasa en Venezuela, hay errores de ambas partes. El Gobierno ha cometido errores, pero la oposición presenta también un grado de incoherencia. Las situaciones no suceden porque sí, no hay nada casual. Venezuela no es una democracia plena, pero yo no soy certificador de democracia.
Algunos países de la región han decidido impulsar una acción ante la Corte Penal Internacional. No es la primera acción internacional de este tipo que se lleva adelante. Nos enteramos de esa decisión por los medios de prensa. No fuimos ni avisados, ni consultados, ni invitados, pero tampoco teníamos por qué serlo. No sé por qué no fuimos consultados. En ningún momento nos plantearon esto. Estamos preocupados por la situación venezolana.
Creo que los hechos llevados adelante por Almagro como secretario general de la OEA hablan por sí solos.
No voy a responder a las apreciaciones de Esteban Valenti. Las apreciaciones de Mieres y Lacalle Pou son un tanto desajustadas. Me parece un exabrupto decir que Uruguay tiene una postura cómplice con Venezuela. Sería muy cómoda la defensa acrítica de Venezuela, al igual que sumarnos al hostigamiento.
Venezuela no es el modelo que yo quiero para Uruguay. Hay que ayudarla a que supere la gravísima situación que tiene. Pero los problemas no se resuelven con comunicados o acciones espectaculares, sino con acciones cotidianas.
Estimamos que en Uruguay hay alrededor de 10.000 ciudadanos venezolanos que han llegado en los últimos años.
