Alzugaray contó que la ciudad aún esta semi paralizada y se puede ver en la población un estado de "calma tensa".
El uruguayo Gustavo Alzugaray reside en forma permanente en la ciudad atacada desde 2011 junto con su esposa. Él trabaja desde casa, pero su esposa sale todas las mañanas rumbo a la oficina donde se desempeña. Esa mañana se enteraron de los atentados a través de la radio y decidieron que él la acompañaría caminando -no en metro- hasta el trabajo. En la mitad del camino se enteraron que también había explotado una bomba en el metro.
Explicó que a nivel de transporte hay varios servicios que no funcionan, y los que funcionan lo hacen parcialmente. A partir de las 19:00 ya no funciona. El tráfico, dado la ausencia de transporte público, dijo que se hace caótico.
Alzugaray explicó que la mitad de las personas que viven en Bruselas, no son belgas. La conmoción igual es considerable.
