El ojo en el cielo: Montevideo crece como planta de ensamblado de satélites

Fabricio Borsellino, responsable de Satellogic en Uruguay, contó cómo trabajan a nivel global en la distribución de imágenes e información y habló del potencial para desarrollar más en Uruguay.

Desde el año 2015 funciona en nuestro país la empresa argentina Satellogic, instalada en plena zona franca de Uruguay, la cual pretende que en los próximos años el país austral se posicione como una de las naciones con más satélites en órbita, alcanzando unos 300 dispositivos de este tipo que viajarán alrededor de la Tierra. La compañía, también tiene sedes en Buenos Aires, Barcelona, San Francisco y Tel Aviv, aunque en Montevideo se ubica la planta dedicada a la manufactura y ensamblado de los satélites.

Satellogic tiene unidades en distintas partes del mundo. En la parte de ingeniería tenemos matemáticos, físicos e ingenieros que arman el diseño del satélite y necesitaban un lugar donde poder armarlo. Uruguay tiene el régimen de zonas francas, que es muy bueno para hacer importaciones de cosas, trabajarlas y sacarlas. En el caso del satélite es así. Además, la cercanía con Buenos Aires nos permite que la gente pueda venir y ver cómo se consiguen esas cosas. Definimos en 2015 hacer una planta en Montevideo, en Zonamérica. Somos 37 personas trabajando en Satellogic Uruguay y la verdad que es muy bueno.

Satellogic es una empresa verticalmente integrada, es decir, diseñamos los satélites, los manufacturamos, los mandamos al espacio y después los controlamos nosotros. Después de que tenemos las fotos, que las vendemos, pero el mercado de imágenes no es tan interesante como el de información. Estados y personas compran esas fotos para tomar decisiones.

Por ejemplo, sos un inversor que quiere ver cómo están los granos de café en África para cosechar, cómo están los barcos de petróleo o querés saber cuántas silobolsas hay. También tenemos cámaras hiperespectrales que ven las moléculas que ve el satélite para saber si hay algas en un río, por ejemplo. Es para tomar decisiones globales en un mundo que ya es globalizado.

En Tel Aviv tenemos lo que es análisis de imagen, en Barcelona todo lo que es data science y machine learning, que permite entender lo que estás viendo. La idea no es tener una persona que está viendo todo el tiempo.

No hay legislación pero hay buenas prácticas. Lo que hacemos es registrarnos en la Unosa. No hay legislación internacional, pero va a haber en cualquier momento. Hay unos 3.000 a 7.000 satélites en órbita. Tenemos ocho en este momento. Y van a ser diez más en un mes, desde China. La idea es tener 300 volando.

Usos

Vendemos información pero también imagínate el caso de un país que no tiene satélites y le interesa tener la capacidad en el territorio. Eso lleva tiempo, no solo plata. Lo que podemos ofrecer es la constelación dedicada: cuando los satélites pasan por ahí, le alquilamos la utilización del satélite, siempre y cuando no sea para fines bélicos, sí de defensa. Hubo un país que nos pidió.

La información es poder y eso se puede usar para un fin. Nosotros establecemos un contrato en que entendamos que no se cumpla el fin, lo damos de baja.

Hemos lanzado de Rusia, China y Guyana Francesa. Fue una linda experiencia porque uno de nuestros compañeros pudo ir. Ahora en China hay uno de los chicos apoyando la campaña de lanzamiento.

Nos han pedido contar paneles solares. Otros quieren contar árboles, vehículos estacionados. Nuestra capacidad es un píxel por metro cuadrado. O sea, no llegamos a ver de quién es el auto ni la matrícula. Entendemos que no es necesario ir tan a fondo. Lograr eso con un satélite como los nuestros, que pesan 40 kg, es muy complicado. Hacer un satélite lleva como tres meses en hacer y nosotros lo hacemos en uno. Salen 200 veces menos que un satélite tradicional.


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