Graciela Villar sobre "El Frente te escucha": "Hubo un pecado de soberbia y desapego"

La presidenta de la Departamental por Montevideo participó de los encuentros "El Frente te escucha", y expresó que la ciudadanía realizó "una autocritica en vivo". Además, afirmó que "estos insumos no cayeron en saco roto", y que planean ser parte de las propuestas de gobierno para las intendencias y a nivel nacional. 

Graciela Villar - presidenta departamental de Montevideo, candidata por vicepresidenta por el Frente Amplio

¿Qué fue lo que más escucharon en estos días?

Fue variado y todo depende de la zona. Montevideo tiene esa posibilidad de hace un corte y ver múltiples realidades en un territorio tan pequeño. Casi 300 reuniones tuvimos, y quedan 12 o 15 que fueron agendadas por cuestiones organizativas para fechas posteriores.

Para nosotros fue una autocritica en vivo; cuando la crítica te la haces desde afuera de la organización. Más o menos fue en la misma dirección de lo que veníamos pensado: la pérdida del vínculo con las organizaciones sociales, la aplicación de algunas políticas que tenían impactos muy diferenciados en Montevideo y en el interior, el no habernos acercado antes, la constatación de evaluación de políticas general positiva, pero con aterrizajes totalmente diferencial en el territorio nacional.

Los temas de seguridad estuvieron también, los de políticas sociales y sus implicancias diferentes en Montevideo y en el interior. Digo esto porque el recorrido ha sido nacional y las realidades han sido diferentes.

¿Cuáles fueron esas políticas que impactaron distintos en Montevideo y en el interior?

Según la gente, la discusión sobre los cajeros automáticos que se dio en poblaciones que tenían menos de 2.000 habitantes. Implica que una política general tiene impacto en la vida individual de las personas bien distinto dependiendo del lugar donde esté.

¿Y cuál fue el reclamo en Montevideo?

Pasa por el tema de seguridad, pasa por ese vínculo con la sociedad de atender problemas más específicos, más localizada. Montevideo tiene mucha asimetría: hay realidades muy diferentes. Costa y centro es una realidad, y cuando se vas acercado a Piedras Blancas, Manga, el Cerro profundo, las necesidades son otras. Pero estuvieron en el mismo rango.

En algunos lugares hay más énfasis en el tema seguridad y política social más focalizada, por ejemplo el caso de Casavalle, donde hay una población principalmente de jóvenes, que debieron tener una atención y un seguimiento mucho más profundo durante estos 15 años de gobierno, y muchas veces la política social aterriza pero no permanece, cuando hay problemas estructurales  Fue bien interesante esa visualización. Hay zonas que hay una vulnerabilidad que se viene arrastrando de generación en generación. El impacto de una política social puntal que no se sistematiza y es multidimensional no resuelve el problema estructural, a penas le pone un paño.

¿Y en la costa y el centro?

Sobre los temas de seguridad, mayor diálogo de que tienen una necesidades diferentes, muy asociado a temas presupuestales, cómo se asignaban o no. El tema transparencia no fueron el centro en las que yo fui.

¿Por qué esos reclamos no llegaron a ser escuchados?

Hubo un pecado de soberbia y de desapego con la posibilidad de tener políticas más flexibles. Si vamos a escuchar, siempre son de recibo, porque ahí no vamos a contraponer ni argumentar; vamos a escuchar. Haremos nuestra propia sistematización También nos dicen aburrimiento, que no plantemos novedades importantes que impactaran, en el tercer gobierno en particular.

¿Cómo era su primera reflexión?

Siempre es muy individual. Yo en algunas cosas decía: "no te puedo creer". Cuando pensas en la macro política, perdes de vista el impacto individual, y que la política no son números, son historias reales. "¿Cómo no me di cuenta? ¿cómo no tuve la percepción para darme cuenta que había un nivel de flexibilidad que subsanara un malestar que implicaba que la calidad de vida de una comunidad?".

Se entrecruza en los lugares donde coincide el gobierno departamental, porque impactan de la misma forma en el territorio. Aparecieron tanto acá como en Salto, y seguro aparecerá en Canelones.

¿En Montevideo?

Una cosa es la preocupación del Club del Golf, con mantener su proyecto, porque es un predio departamental, y el cuidado de la rambla; y otro puede ser el ABC por el CH de Matilde con el tema de la limpieza.

¿Son para un próximo gobierno o para la actual gestión de la Intendencia de Montevideo?

Son dos áreas de trabajo complementarias, tanto la departamental, que ya está trabajando en un programa 2025, como el nacional, sin lugar a dudas, estos insumos, una vez seas sistematizados, van para la comisión de programa para analizar con mayor detalle qué es lo que hay que proponer.

Somos una fuerza política y una banda de ediles que respalda la gestión de la intendencia y esto va a tener una implicancia. También integrantes de la intendencia de nuestro partido participaron de estos encuentros. La intendenta el día sábado participó en algunos lugares. Estos insumos no cayeron en saco roto.

En el caso de la pobreza, ¿qué se planea hacer?

Tenemos dos variantes: el proceso del 2005, que fue sacar el 40% de la pobreza, hoy tiene una tendencia de total agudización. Hay un retiro muy fuerte de políticas sociales en los territorios que están más afectados, Casavalle, Marconi; el retiro de la universidad; que los gurises puedan terminar la escuela; hay una recaída y recae sobre la Intendencia y tenemos un numero que aumenta.

Cuando dejamos el gobierno, había según un censo, 3.000 personas en la calle, cuando se dejo. Hoy el número está en el orden de 5.000 en todo el país. Hay  problemas estructurales. Hay mucha gente de tercera edad, y hoy hay familias. Hay que redimensionar las políticas sociales, hay que desarrollar una política hacia el tema de las adiciones, que no se tomó fuertemente, aunque se lo tomó como un tema salud publica, pero hay que genera nuevas políticas, trabajar muy seriamente.

Montevideo por su concentración del 40% de la población, pero el problema de la adicción está en todo el país, y Montevideo ha pasado a ser un aeropuerto donde se distribuye para le resto de américa latina. Son debes que han venido agudizando.

El Frente Amplio es la fuerza política más grande del país, y es el único que hizo una autocritica que además es publica. Otros gobernaron 100 y nunca vi una autocrítica en ningún partido que haya estado en el gobierno. Eso es honestidad intelectual.

Hoy confrontar con la ciudadanía y escucharla, que no lo haces con un compañero que tomas un café y discutís. Estás hablando con Juana con Manuela, con Tati, con alguien que nunca lo viste, creo que enriquece el proceso. No tomarlo sería pensar que es un Frente Amplio que no está dispuesto a volver al gobierno.

 ¿Qué hay que hacer para no aislarse de la ciudadanía?

Yo creo que el Frente Amplio hizo poca política, en serio, extraterritorial. La gestión de gobierno absorbió a sus grandes cuadros, sus militantes de toda la vida, y nos despegamos del territorio. Ninguna fuerza política que se despegue de su base de trabajo puede sobrevivir.

Los gobiernos pueden ser alternativas, las organizaciones políticas siguen y marcan los momentos históricos.

Quedó clarísimo que las políticas de seguridad no se solucionaban del día para el otro. Que era una realidad, que no era una sensación térmica. Que sin lugar a dudas esto necesita una política de Estado que trasciende a quien esté en el gobierno. Tenemos mucha cosa para aportar, mucha experiencia. Es un tema que hay que ponerlo en el centro de la mesa, porque no lo va a resolver ningún gobierno. No podemos decir que no le vamos a dar armas a la republicana porque tenemos miedo que la asalten. Tenemos una situación que se ha agudizado que hay que mirarla con una mirada de Estado.

Hay que hacer una mesa de diálogo, y la ha propuesto tanto el Frente Amplio, como Fernando Pereira. En caso cárceles, el apoyo a Juan Manuel Petit no puede ser solo retórico. Necesitamos trabajar con la cárcel, porque eso repercute en la vida de toda la sociedad.

¿La gente no criticó el déficit?

No, porque la gente con la que te estás reuniendo recibió lo que nunca habían tenido: consejo de salario, aumento de salario; la gente pone eso arriba de la mesa, su situaciones de vida. No estuve con la cámara de comercio, no estuve ahí.

Como presidenta, ¿cómo vez la planificación distinta de las elecciones? Me refiero a la aparición de Raffo.

Los escenario son dinámicos y en cada escenario vamos a ver cómo nos vamos a parar. Veremos si Laura va por la departamental todavía. Hay un reposicionamiento, y es re interesante porque también nos desafía como fuerza política. Nosotros tenemos que renovar el voto después de 35 años de comparecencia en el gobierno.

¿Se empiezan a tejer nombres para candidaturas? En tu sector, ¿Mario Bergara?

No me puedo sacar el sombrero departamental. He tenido apoyos unánimes de todos los sectores del Frente para esta responsabilidad. No puedo opinar sobre Fuerza Renovadora. Me parece que no corresponde. Se resolvió presenta un candidato en la fuerza política, pero se va a resolver en septiembre en un encuentro nocional quién es. Porque además puede que haya más de 3 (candidatos)

Y¡o cierro mi ciclo político con la departamental de Montevideo. Hay que dar paso a otras generaciones.


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