Investigación académica reveló que alumnos nacidos antes del 30 de abril "tienen menos posibilidades de obtener buenas notas y mayor posibilidades de repetir"

Una investigación nacional comprobó que los alumnos que ingresan a la escuela antes de cumplir los 6 años tienen más chances de repetir, menos posibilidades de conseguir las mejores calificaciones y, sobre todo, poseen un desarrollo cognitivo más inmaduro en relación a “los más grandes”. Para conversar sobre el tema contactamos con la autora de la investigación, Gabriela Salsamendi.

El estudio fue realizado por Gabriela Salsamendi en su tesis de maestría de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales. Observó el rendimiento de la generación de estudiantes que acabaron la educación inicial en 2016 y los siguió hasta su egreso de cuarto de escuela en 2020. Así, concluyó que los alumnos más chicos –aquellos que cumplen entre febrero y fines de abril- presentan más problemas de aprendizaje.

"Los más chicos que nacieron en febrero, marzo y abril, tienen menos posibilidades de obtener buenas notas escolares, como muy bueno sote, muy buen o y sote, en comparación con los más grandes, nacidos en mayo, junio y julio, y por contra partida tienen mayor posibilidad de repetir", expresó Salsamendi.

Investigación

Mi investigación tiene que ver con dos asuntos. El primero como maestra de muchos años, siempre observé que los niños que recibía en mi grupo y que tenían antecedentes de repetición, muchas veces venían acompañados de fichas acumulativas, que son el registro que hacemos los maestros año a año, con una descripción que decía necesitaba más tiempo mayor tiempo para maduración o que se los dejaba repetidores porque eran muy chicos, eso siempre llamó mi atención. El segundo asunto tiene que ver que tiene que ver con la discusión y debate que se dio por 2017 con respecto a cuál era la edad más conveniente para el ingreso en educación primaria. Una debate que siempre quedó sin resolver naturalmente y que por tanto me dejó esa curiosidad como investigadora de saber qué es lo que pasa efectivamente con los niños que ingresan a la escuela y que han nacido en los distintos meses del año. Fue entonces que hice esta investigación que fue un seguir un conjunto de estudiantes, 15.529 alumnos que fueron evaluados en nivel 5, con la evaluación infantil temprana, evaluación que fue de desarrollo de cinco dimensiones, ese número corresponde al 42% de esos niños de esa corte. Lo que hice fue seguirlos y ver qué pasaba con ese mismo conjunto de niños en el transcurso 2017, 2018, 2019 y 2020, para corroborar que los niños que nacieron más sobre la fecha de corte, que la fecha en Uruguay es el 30 de abril, es decir, los más chicos que nacieron en febrero, marzo y abril, tienen menos posibilidades de obtener buenas notas escolares, como muy bueno sote, muy buen o y sote, en comparación con los más grandes, nacidos en mayo, junio y julio, y por contra partida tienen mayor posibilidad de repetir.

Modificación de la fecha

Corramos la fecha para donde la corramos siempre habrá un año de diferencia. El punto no está ahí, sino cuál es la escuela que nos imaginamos para atender esas diferencias. Lo que no puede pasar es que los estudiantes sean de algún modo penalizados por haber nacido en esa fecha. Una mirada más sobre la personalización de enseñanza y aprendizaje. Poner en discusión la estructura actual de los años escolares. Hay que escuchar las voces de los docentes, entender sus saberes, conocimientos y experiencias.

La única manera de dar respuesta es personalizar los procesos de enseñanza y aprendizaje. Uruguay tiene a su vez otra particularidad es que tenemos una fecha de inicio del año electivo y una fecha de corte para la inscripción que es el 30 de abril. Sabiendo que las fecha es esa y tenemos ese doble resorte que hace saltar la edad en estos más chicos, niños que inician el primer año y aún no tienen 6 años.

Acompañamiento seguramente no esa para todos. Trabajé con un número grande estudiantes y de casos, pero sin dudas que en las escuelas y aulas los docentes tienen casos que son excepcionales, hay otros que son de mayo y junio, que de repente necesitan ese acompañamiento.

Poner una mirada en un asunto que pasa en las escuelas, pero independistamente de la edad, la personalización de enseñanza y aprendizaje debe ser para todos los que necesitan.

Mi punto va en la atención en la diversidad en cualquiera de sus colores tiene que darse independientemente de este asunto particular de la edad. Todas las administraciones han puesto el foco en la atención y en la diversidad, en la personalización de los procesos de enseñanza y aprendizaje, esta administración no es la excepción, creo que hay que dotar de mayor autonomía a los colectivos docentes para ser capaz de flexibilizar y romper los grados escolares que eso ayude a la personalización.

Grupos reducidos

Hay experiencias que hay que sí, muchas escuelas que hace la estructuración de grupos, rupturas de formatos tradicionales y trabajar de manera flexible. Hay docentes que tienen ganas de animarse a estas cosas. Creo que las inspecciones animan al cuerpo docente de escuelas a que se animen a cambiar.

Diferencias entre grupos y privados

No hice esa apertura, porque el número era muy chico. No creo que haya diferencias, porque maestros que trabajan en diferentes centros educativos muchas veces son los mismos, y creo en que están capacitados.

Me parece que pensar la escuela por ciclos es un gran avance. El mejor atenuante es brindar una educación inicial de calidad. Me parece que dotar a los niños de más experiencias y de realidad en las aulas de inicial es clave para que las cuestiones más ligadas al desarrollo se den naturalmente y luego se encuentren con dificultades.


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