“Retrocedimos 40 años”, dijo días atrás el diputado del Partido Colorado Gustavo Zubía luego de presentar –en conjunto con el diputado Eduardo Lust– un proyecto de ley que busca “reivindicar una garantía constitucional que el nuevo Código del Proceso Penal destruyó”. La iniciativa tiene un único artículo y pretende que antes de que un juez defina si una persona queda presa preventivamente, se expongan las pruebas recogidas. Para hablar sobre el proyecto, recibimos al diputado Eduardo Lust y al diputado del Partido Colorado, Gustavo Zubía.
Gustavo Zubía
Retrocedimos 40 años de las garantías que se le da a los justiciables al momento de querer dar la prisión preventiva.
El actual sistema, el 224, no está exigiendo la semiplena prueba. Dice que tendrá que haber “existencia de semiplena prueba” pero no se diligencia. Es lo mismo que un excursionista diga “no te preocupes que arriba, en el monte, hay agua”, pero no te la dan.
La falta de esa garantía es brutal.
Con esta nueva interpretación va a quedar mucho más claro de la exigencia de la diligencia.
Eduardo Lust
El 95 o 96 por ciento de las personas que están presas llegan por un acuerdo con el fiscal. Ahí no hay prueba. Se te acusa de cometer un delito y si aceptas que lo cometiste, se cierra ahí. Yo diría que es casi instantáneo. Por eso se dan incongruencias a veces. Por ejemplo, una persona con antecedentes que había robado un bolso le dieron 18 meses de prisión efectiva y ayer al chofer de ómnibus que atropelló y mató a un joven le dieron dos meses de prisión. Eso porque el fiscal acuerda con el investigado.
El resto de esas personas, exceptuando el 95 por ciento, no acepta la culpa y va a juicio. Y para ese porcentaje menor, la Constitución dice que para ser procesado tiene que estar en in fraganti delito o semiplena prueba de haberlo cometido. Y en el actual proceso, el Código prevé que el fiscal anuncie que tiene semiplena prueba pero no tiene por qué.
Nosotros queremos que ese pequeño porcentaje que no acepta que cometió el delito no vaya preso si no hay algo en la primera audiencia que dé cierta credibilidad de que el delito lo cometió.
Gustavo Zubía
El fiscal tiene en la carpeta elementos de prueba, se los comunica a la defensa, y es en una articulación semántica y no probatoria que se determina la suerte del individuo.
El famoso caso de la violación del Cordón, llamada así, fueron presos, y luego otro juez y otro fiscal determinaron la inocencia.
No hay fiscales suficientes.
Este Código fue hecho sin los fiscales suficientes.
Eduardo Lust
El sistema perfecto no existe. Nosotros pretendemos darle un marco más jurídico a un Sistema Penal que está para nosotros descalificado.
El fiscal necesita un equipo que lo asista y no más fiscales con uno o dos ayudantes.
Gustavo Zubía
Es un tema de garantías, de que vas preso sin diligenciar prueba por ocho meses. Y a los ocho meses se empiezan a ver qué pruebas se van a diligenciar.
Estos temas son brutales pero a nadie le hizo urticaria.
Este es un intento de dar garantías. Primero demostremos que es culpable, y luego le caemos con los cuatro fierros arriba de la cabeza. Y hoy estamos en problemas en ese ámbito.
Eduardo Lust
Lo que tiene que hacer el gobierno es hacer las cosas y luego esperar la reacción del sistema. No pedirle permiso a los partidos, hacerlo.
Mi propuesta es la del área de seguridad en el shopping. Para mí hay que olvidarse del costo político y tratar de hacer algo que no se ha hecho.
Cuando vas a un centro comercial y ves a un guardia de seguridad que no está armando, que puede ser hasta una persona mayor de edad, ya te da cierto mensaje. Lo que hay que ver es lo que esa persona evita, que eso nunca se va a saber.
Gustavo Zubía
El Ejército en la frontera hace funciones de policía. Detiene, investiga, revisa el vehículo, pide identificación. La Prefectura hace funciones de policía. El Ejército en las misiones de paz hace funciones de policía. Y acá, en el Marconi, salen los tipos con ametralladoras, parecería que no es territorio de Uruguay. Estamos permitiendo que esas bandas operen ilícitamente copando esos barrios, mandando mensajes, aterrando a los vecinos.
Estamos con una pandemia de muertes.
Nadie quiere pagar el costo de los muertos que puede haber.
No se quiere pagar el costo político de sacar militares a la calle.
