“Hemos tenido presiones para que no se diga lo que está pasando”, apuntó Emiliano Mandacen, presidente de ADES y dirigente de Fenapes.
A casi una semana del comienzo oficial de clases, hacemos un primer balance. Las cifras que manejan los sindicatos de la educación sobre inscripciones y asistencias son muy diferentes a las que manejan las autoridades de la educación.
Hablamos con Emiliano Mandacen, presidente de ADES y dirigente de Fenapes.
Un comienzo de cursos bastante complejo, con características caóticas, difíciles. Evaluando cómo vamos a realizar una reunión bipartita para tratar de establecer algunos centros que la próxima semana no podrían tener condiciones de empezar las clases.
Todavía no tenemos una evaluación clara. Queremos un panorama global para contrastar con lo que presenta Secundaria. Sabemos que hay varios liceos con sobrepoblación de estudiantes y con falta de personal.
Desde el punto de vista de la elección de horas, con el trabajo bipartito que se hizo, hoy tenemos un proceso mucho más avanzado y muchas horas asignadas. Pero hay avances que aún son insuficientes. Lo que generó un proceso caótico este año fue el proceso de inscripción. En la mayoría de los centros de estudios del país, efectivamente, no arrancaron las clases. Hemos tenido presiones para que no se diga lo que está pasando.
En liceos como el Miranda, IAVA, Bauzá, no han empezado estrictamente las clases. Hay un montón de estudiantes que no se sabe dónde están, muchos padres que terminan molestos en los liceos por esta situación. El sistema informático no fue bien testeado. La promesa de tener a la velocidad de un clic la posibilidad de que cada padre elija el liceo que quiere… eso es imposible en la situación actual de Secundaria. Vamos a exigir que salgan públicamente a hacerse cargo de esta situación. No podemos plantear el inicio de clases como algo ideal cuando no lo es.
Uno puede establecer actividades lúdicas o de presentación durante uno o dos días, después hay que empezar con el programa. Pero eso no va a poder ocurrir, porque en la realidad completa, varios liceos no están funcionando. Hay unos 2.5000 estudiantes que no reconfirmaron su inscripción.
Universalizar la educación media está perfecto. Pero ¿estamos generando la democratización de la enseñanza media? Los padres quieren que sus hijos vayan de primero a sexto, que se forman integralmente.
No queremos que se ejerzan más presiones sobre los compañeros que no concuerdan con este diagnostico de que está todo en buenas condiciones.
