Nació como un proyecto diseñado especialmente para la CIA, pero luego alcanzó dominio público.Y a lo largo de estos años, Google Earth sirvió para crear cosas impensadas.
Hace 15 años, los ingenieros de Google se pusieron una misión: crear una herramienta para poder ver el mundo desde los ojos de un astronauta, pero desde la computadora.
Bajo esa premisa nació Google Earth, una herramienta que combina bases de imágenes geográficas del planeta, fotografías aéreas y satelitales y datos geográficos desde la cual se puede recorrer cualquier parte del mundo.
“Google Earth es mucho más que un globo digital en 3D. La tecnología detrás de esta herramienta democratizó la creación de mapas, lo que permite a cualquiera comprender mejor nuestro mundo y tomar medidas para crear un cambio positivo”, destacó la empresa en un comunicado. Y resaltó algunas de las historias que marcaron a Google Earth en estos últimos 15 años.
Una de ellas sucedió apenas dos meses después de la aparición de la herramienta. En agosto de 2015 el huracán Katrina azotó la costa del Golfo arrastrando todo a su paso. Google Earth trabajó en conjunto con equipos de rescate al poner a disposición de los socorristas imágenes actualizadas de la catástrofe para comprender mejor el impacto del huracán y llegar a salvar más vidas.
Otra de las historias destacadas tiene como protagonista a un profesor de inglés que desarrolló Lit Trips. Una serie de mapas con recorridos que siguen los viajes de personajes conocidos de la literatura. Hoy el proyecto incluye más de 80 viajes literarios para maestros y estudiantes de todos los niveles de educación y con acceso libre a escala mundial.
A lo largo de estos años, Goolge Earth ha servido para impulsar proyectos que estudian la vida animal. Desde el comportamiento de las vacas al pastar, hasta ser la base de un plan de protección de elefantes que son víctimas de la caza furtiva.
Por último, está la historia de Saroo Brierley. Un niño que fue separado accidentalmente de su familia en India cuando tenía apenas cinco años. Saroo, de cuya vida se hizo una película, terminó adoptado por una familia en Australia. Cuando se convirtió en adulto, Saroo utilizó Google Earth para trazar el camino exacto que podría llevarlo a su pueblo natal. Finalmente se reencontró con su familia.
De esta forma, Google Earth marcó un antes y un después en la manera de ver el mundo a la distancia.
