Los resultados mostraron que cumplir con las recomendaciones de ejercicio (150 minutos por semana) reduce el riesgo de enfermedades cardiacas en un 22% en mujeres y un 17% en hombres.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda realizar al menos 150 minutos de ejercicio a la semana. Sin embargo, un estudio internacional encontró que para reducir significativamente el impacto de patologías cardiacas se necesitan más minutos y esto depende del género. ¿Quiénes necesitan más tiempo de deporte? ¿Hombres o mujeres? Lo vemos a continuación.
Las mujeres realizan menos deporte que los hombres, sin embargo, según un estudio, son ellos quienes necesitan más tiempo de ejercicio para lograr un impacto positivo real sobre su salud cardiovascular.
Por ejemplo, para reducir en un 30% el riesgo de desarrollar una enfermedad cardíaca, las mujeres necesitan 250 minutos semanales de ejercicio moderado a intenso, mientras que los hombres deben duplicar ese esfuerzo y alcanzar unos 530 minutos por semana.
Para llegar a esta conclusión, los investigadores de la Universidad de Xiamen en China analizaron datos de más de 85.000 personas del Biobanco de Reino Unido. De este grupo, 80.243 no tenían antecedentes cardíacos y fueron seguidos durante casi ocho años para evaluar si se desarrollaban patologías. Otros 5.169 ya padecían cardiopatías y fueron observados para determinar su mortalidad.
Los resultados mostraron que cumplir con las recomendaciones de ejercicio (150 minutos por semana) reduce el riesgo de enfermedades cardiacas en un 22% en mujeres y un 17% en hombres. Entre quienes ya tenían enfermedad cardíaca, la diferencia es mayor, las mujeres físicamente activas redujeron su riesgo de muerte en un 70%, mientras que los hombres lo hicieron en un 19%.
¿Por qué hay tantas diferencias entre hombres y mujeres? Según el equipo, una de las diferencias podría deberse a factores fisiológicos. Los niveles de estrógeno —hormona que favorece la oxidación de grasas durante el ejercicio— son más altos en las mujeres, lo que potencia el efecto protector del movimiento. También influye la composición muscular: los hombres tienen más fibras asociadas a la fuerza explosiva, mientras las mujeres tienen más fibras vinculadas a la resistencia aeróbica y la eficiencia metabólica.
Si bien ambas explicaciones necesitan diferentes técnicas y tiempo de investigación para ser confirmadas, los autores plantean que ambos sexos deberían recibir recomendaciones diferentes sobre la cantidad de tiempo que deben ejercitarse.
