Más de mil personas murieron en el país solamente en marzo pasado por atentados terroristas.
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Al menos 17 personas murieron y casi medio centenar resultaron heridas en cuatro atentados con bomba ocurridos en Irak, en su mayoría contra fuerzas de seguridad y milicias chiítas en Bagdad y en el sur del país.
Fuentes de seguridad informaron que un suicida detonó un cinturón de explosivos en un puesto de control conjunto cerca de un puente en el noreste de la ciudad. El ataque causó la muerte de cinco personas y heridas a otras doce.
Otros cinco iraquíes murieron y 20 sufrieron heridas cuando otro suicida detonó su propio cinturón en un restaurante frecuentado por milicianos chiítas. Los miembros de la denominada Multitud Popular fueron también blanco de otro ataque, que detonó un coche bomba contra un convoy de ese grupo a 40 kilómetros de la capital. Tres personas perdieron la vida y ocho sufrieron heridas de consideración.
El cuarto ataque tuvo lugar en el centro de la ciudad de Basora, donde el estallido de otro vehículo conducido por un suicida causó cuatro muertes y dejó otros seis heridos.
Al menos 1.119 personas han muerto en Irak y otras 1.600 fueron heridas en actos de violencia terrorista solamente en marzo, según cifras de Naciones Unidas.
