Un séptimo hombre fue capturado vivo, en este atentado reivindicado por el Estado Islámico.
20 extranjeros murieron por la noche del viernes en una toma de rehenes durante once horas en un restaurante de Dacca, Bangladesh, un ataque reivindicado por el grupo terrorista Estado Islámico que culminó el sábado tras un asalto de las fuerzas de élite del país.
Así se dio muerte a seis secuestradores y se rescató a trece rehenes que todavía permanecían atrapados en el restaurante, ubicado en un barrio diplomático de Dacca. Un séptimo atacante fue capturado vivo.
Entre las víctimas se cuentan nueve italianos, siete japoneses, un estadounidense, entre otras nacionalidades. Según las autoridades bangladesíes, la mayoría murieron apuñalados brutalmente.
En Roma, el primer ministro italiano Matteo Renzi anunció que enviará una delegación a Dacca. "Somos como una familia que ha sufrido una pérdida dolorosa, pero que no tiene la menor intención de darle la razón a quien piensa que la destrucción de nuestros valores es un objetivo al que consagrar su existencia; nosotros somos más fuertes", afirmó Renzi.
Familiares de las víctimas esperaban el sábado a las afueras del restaurante a recibir noticias de las autoridades, mientras comandos armados seguían haciendo guardia.
Al grito de "Alá es grande", con armas y explosivos, los atacantes irrumpieron en el restaurante y provocaron la masacre.
