Se trata del crimen de General Rodríguez, con el que se vinculó al exjefe de gabinete de CFK, Aníbal Fernández.
Los hermanos Cristian y Martín Lanatta y Víctor Schillaci fueron condenados a prisión perpetua en Argentina por un triple homicidio en General Rodríguez: se los acusa de haber matado a Sebastián Forza, Damián Ferrón y Leopoldo Bina, en un caso relacionado con el tráfico de efedrina. El tema estuvo presente en la última campaña electoral, ya que en el programa periodístico Periodismo Para Todos se lo vinculó con el candidato a gobernador de Buenos Aires Aníbal Fernández, acusado por Martín Lanatta y otros involucrados de ser el autor intelectual del hecho. Ahora, vuelve a la agenda pero por otro motivo: los tres se fugaron de la de Unidad Penal Nº 30 de General Alvear, una cárcel de máxima seguridad.
Según la fiscal que investiga el caso, se fugaron con una pistola de juguete que imitaba a una 9mm y con ropa de guardacárceles, cerca de las 2:30 de la madrugada y tras maniatar y reducir a varias guardas y huir en el vehículo de uno de ellos. La Policía capturó la camioneta que utilizaron, y también detuvo a un familiar de uno de ellos. El fiscal habló de ayuda externa, pero hasta el momento no están imputados ninguno de los miembros del sistema penitenciario.
La gobernadora de Buenos Aires María Eugenia Vidal, quien derrotó a Fernández, removió a los jefes de la cárcel y a la cúpula del servicio penitenciario bonaerense. La fuga despertó sospechas en la oposición y el oficialismo sobre eventuales motivos políticos. En la Casa Rosada ven el tema con preocupación y no descartan un mensaje mafioso.
La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, y su par bonaerense Cristian Ritondo se refirieron a al fuga. "No queremos tener teorías conspirativas, tenemos que trabajar para que estos delincuentes vuelvan a estar tras las rejas", dijo Bullrich. Ritondo, mientras tanto, anunció que se ofreció por ellos la máxima recompensa que se puede ofrecer por información: $2.000.000.
