Un japonés de 30 años fue condenado a muerte en Tokio por matar a nueve personas que atrajo a través de Twitter

El asesino admitió haber matado y desmembrado en su apartamento a nueve personas de entre 15 y 26 años, incluidas ocho mujeres.

En octubre de 2017 la policía japonesa encontró nueve cuerpos de ocho mujeres y un hombre, dos de ellos decapitados, en un apartamento en los suburbios de Tokio.

Tres años después la justicia condenó a muerte al responsable Takahiro Shiraishi, un hombre de 30 años que tenía 27 en el momento de los asesinatos.

El homicida apodado el asesino de Twitter captaba a sus víctimas en esa a red social, buscaba personas que manifestaran tendencias suicidas y les decía que podía ayudarles a concretar sus intenciones de matarse e incluso morir a su lado.

En su cuenta de Twitter se presentaba como verdugo profesional.

Shiraishi también fue juzgado por haber descuartizado a sus víctimas y haber almacenado sus restos en heladeras en su pequeño apartamento de Zama, un suburbio del suroeste de Tokio.

El día que arrestaron al asesino descubrieron en su apartamento 240 fragmentos de cuerpos almacenados en heladeritas o cajas de herramientas cubiertas de arena para gatos para ocultar el olor que despedían.


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