Además, constató que la mayoría de los estudiantes se sienten cómodos en los centros de estudios, aunque hay un 5 % que dicen sufrir hostigamiento o acoso.
En la última prueba PISA se evaluaron las actitudes que tienen los estudiantes hacia la ciencia y si se imaginan trabajando en esa área en el futuro.
“Los chiquilines quieren estudiar ciencias. El 40 % de los chicos con padres con educación terciaria terminada están decididos por hacer ciencias. Es más alto que algunos países de la OCDE pero más bajo que algunos de Latinoamérica. En resolución colaborativa de problemas, a las niñas les va mejor que a los varones”, dijo la coordinadora de las pruebas PISA María Sánchez.
Este cambio se va transformando en tendencia en un país donde sólo el 25 % de los estudiantes cursan carreras relacionadas con la ciencia o la tecnología.
“Creo que es algo muy interesante. Se va naturalizando el hecho de que todos podemos estudiar ciencias”, dijo el presidente del Codicen Wilson Netto.
La prueba PISA evalúa también las habilidades socioemocionales y si tienen un sentido de pertenencia con el centro educativo.
“Hay un alto sentido de pertenencia. Hay un 5 % de estudiantes que se han sentido acosados y eso seguramente afecta el sentido de pertenencia. A los chiquilines les gusta ir al liceo y quieren aprender”, agregó Sánchez.
