Los fueros son una inmunidad que tienen los legisladores para no ser sometidos ante la Justicia.
La fiscal de Delitos Sexuales Alicia Ghione presentará en los próximos días la solicitud para que el senador blanco Gustavo Penadés sea suspendido en sus fueros parlamentarios, según supo Telemundo con fuentes de la investigación.
Los fueros es una inmunidad que tienen los legisladores para no ser sometidos ante la Justicia. Si los mantiene, no podría ser imputado ni condenado.
Ghione deberá presentar su solicitud ante un juez de Garantías, que elevará el caso a la Suprema Corte de Justicia (SCJ). El organismo superior de la justicia uruguaya será quien lo remita al Parlamento.
Allí, la cámara de Senadores (donde actúa Penadés) o la de Representantes (para la cual fue electo), deberá votar si le quita los fueros para que pueda presentarse ante la Justicia. Existen dos bibliotecas entre los juristas especializados sobre cuál cámara debería analizar el desafuero. En cualquier caso, dos tercios de los integrantes de la cámara deberán votar afirmativamente para que Penadés deje sus fueros.
Apenas comenzó la investigación, el dirigente del Herrerismo solicitó en una carta a la presidenta de la Asamblea General, Beatriz Argimón, que los legisladores le levanten los fueros en caso de ser necesario. El pedido no tiene relevancia jurídica, dado que serán los legisladores los que decidan si sucede o no. Sin embargo, si mantiene su posición podría facilitar que se llegue a los votos necesarios.
Al momento hay ocho personas que denunciaron que siendo menores recibieron pago de Penadés a cambio de sexo. Según supo Telemundo, hay tres víctimas más que en las próximas horas declararán ante Ghione.
Penadés declaró este jueves como indagado en la sede de Fiscalía de Delitos Sexuales y a la salida aseguró que no cometió delitos y que, por tanto, no tiene nada de lo que arrepentirse.
En caso de comprobarse las conductas del nacionalista configurarían dentro del artículo 4 de la ley 17.815 referido a retribución o promesa de retribución a personas menores de edad o incapaces para que ejecuten actos sexuales o eróticos de cualquier tipo.
El modus operandi que se le imputa se repite entre los denunciantes en cuanto a "cómo se contacta con las víctima, qué hace, cómo conquista la situación y cómo logra callarla", según dijo la abogada Soledad Suárez del consultorio jurídico de la Universidad de la República a Desayunos Informales a mediados de mayo.
La militante blanca Romina Celeste -primera denunciante- contó en el programa Hacemos lo que Podemos (Directv) que, en 2007 cuando tenía 13 años, Penadés le pagó a cambio de mantener relaciones sexuales. Ella caminaba por el Parque Batlle cuando desde un auto gris el legislador le hizo señas para que subiera a su vehículo y juntos fueron a un motel donde se dio la situación de abuso, afirmó.
