En la solicitud se les tipificó el delito de homicidio culpable.
El bebé falleció en agosto del 2013, seis días después de nacer. Tenía neumonía, aspiración de líquido amniótico, lesiones arteriales en pulmones, trombosis y necrosis cerebral. La fiscal Daniela Revello entendió que, si bien la madre se hizo todos los controles y exámenes, la ginecóloga y la partera no evaluaron el riesgo de una infección urinaria que tuvo en el segundo trimestre de embarazo.
La fiscal pidió procesar a la ginecóloga y la partera, que también habían sido denunciadas por la muerte de la paciente Lucía Olivera en el mismo Hospital de Paso de los Toros cinco meses antes. Por ese otro caso fueron absueltas. En el caso del bebé hubo también un juicio civil con una condena inicial contra ASSE de US$ 350.000 por daño moral, que luego se redujo a la mitad en la apelación.
