El senador blanco aseguró que su proyecto de ley de legítima defensa presunta para la Policía no es una iniciativa para el "gatillo fácil".
Así habló el senador Luis Lacalle Pou:
Hace pocos días, muchos de nosotros, nos enteramos de prácticas policiales en países como Canadá, cómo es la aproximación a un enfrentamiento, cómo son las herramientas en lo que hace al armamento y lo que hace las herramientas jurídicas que tienen en este país como en otros.
Y hablar de legítima defensa presunta, un instituto que ya existe en lo que hace al hogar en horas de la noche trasladarlo a la acción policial, justamente habla de una presunción de legítima defensa. Es una presunción relativa y no absoluta.
Lo que queremos hacer es darle más herramientas en este caso jurídicas, para que el policía se sienta en ese respaldo que está cuidando al ciudadano de bien y que ese respaldo al ciudadano de bien tiene consigo no gatillo fácil,no abuso policial. No se trata de eso,simplemente igualdad de condiciones o superioridad de condiciones que aquel al cual se está enfrentando.
Todos hemos visto en las noticias la cantidad de procesamientos policiales que han habido,algunos por supuesto que contarán con razones suficientes pero cuando leemos de algunos episodios,cuando vamos al parte mismo, cuando vemos los informes judiciales a veces sentimos que estos policías necesitan más elementos jurídicos en la defensa de la ciudadanía.
Como siempre ha hecho el Partido Nacional, tratamos de aportar, tratamos de apoyar, queremos una discusión civilizada, que no es la que está dando el Ministerio del Interior, que no es la que está dando el gobierno, porque lamentablemente nos tiene acostumbrado a descalificar, de alguna manera decir que nuestras ideas están lejos de la realidad, que no conocemos, que estamos mal asesorados.
Desde nuestro punto de vista, este instrumento de la legítima defensa presunta al policía, insisto, es un respaldo no solo al agente sino también aquel que se tiene que sentir respaldado que es el ciudadano. Estamos dispuestos a sentarnos a discutir, estamos dispuestos a encontrar un camino en común.
Lo que no estamos dispuestos, son los argumentos mediocres que descalifican y muchas veces estos argumentos mediocres surgen desde el propio oficialismo, surgen desde herramientas que deberían ser de toda la población, de la nación, del gobierno, y no teñir de ideología y no teñir de política partidaria.
