El ente apunta que además de un error humano hubo un mal funcionamiento mecánico.
La madrugada del domingo 3 de febrero algo salió mal en la planta potabilizadora de OSE de Laguna del Cisne cerca de Salinas. Según la versión oficial -recogida en el informe final que OSE elaboró y que varias fuentes relataron a Telemundo- los niveles de agua de las piletas de reserva descendieron bruscamente lo que generó un efecto de vacío en una de la bomba destinada al vertido de productos, la manguera por donde sale la soda caustica es la que se encontraba más cerca de esa bomba y el vacío ocasionó una succión que implicó un vertido de esa sustancia mayor del debido en el agua.
Cuando en operario de turno notó que el agua estaba turbia, no pensó que se tratara de exceso de soda que generó desprendimiento de residuos de las cañerías, sino que estimó que requería de mayor filtrado y por eso se paso el agua por filtros de carbono. El agua llegó a los hogares con exceso de soca caustica y un PH de más de 12 puntos cuando el permitido no debería superar el 8,5. Esto generó lesiones en la piel de varios usuarios que intentaron ducharse, el agua salió durante horas turbia y oleosa.
El origen del problema no se supo hasta horas después, y el funcionario no cumplió con los protocolos de dar aviso a las autoridades. Aquí a la falla humana se suma un mal funcionamiento mecánico que fuentes de OSE aseguran que se dio durante breves instantes. El informe esta ahora en manos de la Ursea que es el organismo encargada de la fiscalización del suministro de agua, entre otras cosas. En breve los técnicos de esa institución deberán formular una evaluación de la respuesta de OSE.
