El dinero que pretendían robar los delincuentes que llegaron en moto quedó fuera del local.
Un delivery que trabajaba para un supermercado Kinko de Pocitos murió esta madrugada luego de intentar detener a un delincuente en la noche del domingo en el local de Sarmiento y Obligado.
Los delincuentes llegaron en una moto negra cerca de las 23:30. Uno de ellos le exigió la recaudación a una de las empleadas.
En el momento en que se estaba retirando del local, el delivery que había sido llevado hacia el fondo con el resto de sus compañeros, intentó reducir al delincuente.
Recibió entonces dos disparos: uno en el abdomen y otro en el pecho. Fue trasladado al Hospital de Clínicas, donde murió a las 5:30 de la mañana.
El dinero que pretendían robar los delincuentes quedó fuera del local.
