Cinco personas resultaron heridas, entre las que se encuentra un niño de 11 años.
Los delincuentes llegaron a la zona del hipermercado ubicado por avenida De la Playa en tres vehículos: dos camionetas blancas y un auto negro.
Los asaltantes esperaron que el camión de la empresa Prosegur saliera con el dinero del banco BBVA para bajar de los automóviles y, sin emitir palabra alguna, abrir fuego sobre los guardias.
El tiroteo generó pánico entre al menos un centenar de personas que estaban dentro del centro comercial, tanto haciendo compras como cenando en algún sector.
En un comunicado de prensa, Prosegur señala que el tiroteo comenzó cuando un guardia portavalores de la empresa trasladaba una remesa de unos 30 kilos en un carro de transporte desde el interior del centro comercial hacia el camión blindado.
Se señala también que el camión se encontraba en la puerta, acompañado por dos guardias armados a sus costados.
Sobre el incidente, se indica que la lluvia de balas de armas automáticas o semiautomáticas de grueso calibre debió ser perpetrado por no menos de ocho o diez personas.
En el intercambio de disparos, según el comunicado, dos funcionarios de la empresa fueron lesionados. Uno de ellos recibió una bala en una pierna. Ninguno de los dos heridos está grave.
Además, otras tres personas resultaron heridas y ninguna de ellas tampoco corre riesgo de perder la vida. Se trata de un joven de 29 años perteneciente a la guardia interna del hipermercado, que recibió un tiro en un tobillo, con fractura de tibia y peroné. Otro guardia interno del banco, de 31 años. Y un niño de 11 años que, según fuentes policiales, recibió un fuerte golpe tras los ruidos producidos por los disparos.
Los delincuentes se hicieron con 18 millones de pesos y 70.000 dólares. Los autos que se utilizaron en el asalto fueron dejados a pocas cuadras del centro comercial.
Se estima que los asaltantes fugaron en otros vehículos.
La Policía investiga el hecho.
