El nieto de la víctima confesó el crimen y dijo que lo hizo para poder pagar una deuda.
Este viernes el hijo de la víctima llegó a la calle Cerrito, en una zona transitada de la ciudad de Paysandú, para visitar a su madre quien no contestaba las llamadas desde el viernes en la tarde.
Al entrar junto con su nuera encontraron a la mujer de 84 años tendida en el suelo, ya sin vida. La víctima tenía signos de haber sido golpeada y varias puñaladas en su pecho y abdomen.
La investigación policial inmediatamente apuntó al círculo más cercano de la mujer. El hecho de que las puertas de la vivienda estuvieran cerradas sugería que la víctima había recibido al asesino.
El testimonio de personas cercanas a la familia puso la mira en el niego de 24 años, quien padece un consumo problemático a las drogas.
En la casa del joven se encontraron vestimentas ensangrentadas, y otros indicios que llevaron a señalarlo como el principal sospechoso.
Ante la Policía el joven dio su versión de los hechos: admitió el crimen y dijo que había ido a pedirle dinero a su abuela porque tenía una importante deuda por drogas que pagar, pero ante la negativa de la mujer de darle dinero resolvió asesinarla.
A última hora de este sábado fue imputado por homicidio muy especialmente agravado por cometerse contra un familiar y por premeditación, y un delito de hurto.
Para los investigadores el joven tenía previsto desde el principio matar a su abuela, una hipótesis que la fiscalía deberá probar en el juicio oral y que supone un agravante en la conducta delictiva.
El ahora imputado fue enviado a la cárcel con 180 días de prisión preventiva a la espera de recibir una condena que puede alcanzar los 30 años de cárcel.
